Compra ingredientes frescos en el mercado principal de Acapulco, cocina platillos mexicanos clásicos con un chef local, degusta mezcal y disfruta tus creaciones en buena compañía.
La mañana en Acapulco se sentía cálida y un poco pegajosa cuando nos encontramos con nuestro chef frente al hotel; éramos solo ocho, lo que facilitaba charlar y resolver dudas. Empezamos en el Mercado Central, donde lo primero que te impacta son los colores: montones de limones verdes, chiles de todos los tonos y el aroma de tortillas frescas que salía de un puesto cercano. Nuestro guía, el chef Luis, nos mostró hierbas locales que nunca había visto antes —epazote y hoja santa— y nos explicó cómo se usan en recetas tradicionales mexicanas. Los vendedores lo conocían bien; uno incluso nos regaló un trozo de mango jugoso para probar entre los puestos.
Después de comprar los ingredientes (y de colarnos para llevar unas tortillas extras de una pequeña fábrica a la vuelta), nos dirigimos a una cocina sencilla en un restaurante escondido en una calle tranquila. No era lujosa, solo mostradores limpios y grandes ventanas por donde entraba la brisa del mar. Nos pusimos manos a la obra preparando guacamole y ceviche, aprendiendo a equilibrar el jugo de lima con el picante justo. El chef Luis nos enseñó a hacer camarones al coco crujientes sin pasarlos de cocción, un truco que sin duda usaré en casa. La sopa de pescado se cocinaba a fuego lento mientras disfrutábamos mezcal y compartíamos anécdotas con los demás viajeros. Para la hora de la comida, la mesa estaba llena de todo lo que habíamos preparado: pescado a la talla ahumado, totopos crujientes y salsas vibrantes. Comer lo que cocinamos juntos fue toda una satisfacción y, sinceramente, sabía mejor que cualquier platillo de restaurante en la ciudad.
¡Claro! El chef te guía paso a paso, incluso si nunca has cocinado comida mexicana.
Avísanos con anticipación; podemos adaptar algunas recetas o sugerirte alternativas en el mercado.
La visita y la clase duran entre 4 y 5 horas, incluyendo tiempo para comer y relajarse.
Sí, el traslado ida y vuelta desde tu hotel o puerto está incluido para tu comodidad.
Incluye recogida y regreso al hotel, todos los ingredientes frescos del mercado, guía profesional del chef, agua embotellada, café o té, degustación de mezcal, comida (todo lo que cocines) y varias pruebas de sabor durante el recorrido.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?