Exprime caña fresca con tus manos en Punta Cana, degusta rones dominicanos raros y añejos por décadas, y prueba bocados locales mientras guías cuentan la historia detrás de cada botella. Con recogida en hotel incluida y un ambiente relajado, esta excursión te hace sentir parte de la isla por unas horas.
“Prueba este, pero tómalo despacio,” nos dijo el guía con una sonrisa, deslizando un vasito por la mesa. El lugar olía a caramelo y algo más profundo, casi ahumado. Acabábamos de llegar a Oliver Lab by Taino Gourmet tras un camino algo movido desde nuestro hotel (la recogida llegó justo a tiempo, algo que me sorprendió — no estoy acostumbrado). El sitio parecía más la sala de alguien que una tienda, con botellas antiguas alineadas y cañas de azúcar apiladas en una esquina. No esperaba exprimir jugo de caña con mis propias manos, pero ahí estaba, pegajoso y riendo mientras intentaba usar la prensa vieja. Mi primer sorbo fue dulce y con un toque fresco, como de campo.
Li, nuestra intérprete, cambiaba entre español e inglés — a veces en la misma frase — mientras nos contaba que el ron es básicamente la historia de República Dominicana en una copa. Nos explicó el Método Solera (yo no tenía ni idea hasta que nos mostró los barriles apilados en forma de pirámide) y cómo algunos de esos rones llevan añejándose más años que yo vivo. También probamos melaza — espesa, oscura, nada que ver con el jarabe que conozco. Había bocados en platos pequeños (todavía sueño con esas mini empanadas), pero lo que más me quedó fue cómo todos se tomaban su tiempo para disfrutar cada trago.
En un momento alguien preguntó por el Cubaney Centenario y Li se rió porque, al parecer, mi pronunciación estaba fatal (“No te preocupes,” dijo, “todos la pronuncian mal”). Todo fue muy relajado — nadie te apura ni te mira raro si no sabes de ron. Al final aprendí lo justo para sentirme orgulloso pidiendo ron en el bar del hotel esa noche… pero sobre todo recuerdo la calidez del momento: gente compartiendo historias, dedos pegajosos por el jugo de caña, la luz del sol entrando por ventanas polvorientas. Si te interesa probar ron dominicano en Punta Cana o buscas algo más que un trago de resort, esta experiencia vale la pena para una tarde.
Sí, incluye recogida y regreso al hotel.
Probarás rones premium como Cubaney Centenario, Unhiq XO, Opthimus y Punta Cana XOX.
Sí, los guías cuentan la historia del ron en República Dominicana y explican métodos como el añejamiento Solera.
Sí, se sirven bocados tipo finger food de cocina internacional junto con los rones.
¡Claro! Exprimirás tu propio jugo de caña como parte de la experiencia.
Se incluye un intérprete para que el idioma no sea problema.
El tour es totalmente accesible en silla de ruedas en todas las áreas.
Los rones tienen un añejamiento de 25 años o más.
Tu día incluye recogida y regreso al hotel en Punta Cana, una sesión guiada de degustación de rones premium añejados en Oliver Lab by Taino Gourmet, prensa de caña de azúcar y prueba de melaza con intérprete durante toda la experiencia. Se sirve agua embotellada y bocados internacionales antes de volver al hotel relajado (y quizás un poco animado).
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?