Recorre Ho Chi Minh como pasajero en moto con un guía local, probando 10 platos callejeros desde ensalada de papaya hasta crepes crujientes y flan cremoso. Ríe con las palabras mal pronunciadas, descubre historias detrás de cada plato y disfruta sorpresas como mercados de flores al atardecer o dulces de plátano con leche de coco que no olvidarás.
Lo primero que me llamó la atención fue el zumbido de las motos — no solo un ruido de fondo, sino el latido de Ho Chi Minh. Mi guía, Linh, llegó a la puerta de mi hotel en el Distrito 1 con una sonrisa y un casco extra. Nunca había ido de pasajero en moto (salvo una vez en Grecia, pero esa es otra historia), así que estaba nervioso. Pero Linh solo asintió y dijo: “Tranquilo, vas a comer más de lo que temes.” Tenía razón. Salimos pitando entre el tráfico, esquivando vendedores de flores y parejas con bolsas, rumbo a nuestro primer bocado: jugo de coco en un puesto diminuto que tiene más años que algunos edificios de mi ciudad.
No sabía qué esperar de un tour en moto por la comida callejera de Ho Chi Minh — ¿solo fideos y caos? Pero fue una experiencia que fue creciendo en sabor y momentos pequeños. Luego llegó la ensalada de papaya, crujiente y fresca, coronada con carne seca de res. Linh me contó que su mamá se la robaba para picar antes de cenar cuando era niña. Volvimos a la moto — el aire olía a chalotas fritas y humo dulce mientras probábamos plátano a la parrilla envuelto en hojas. El vendedor me lo dio con las manos pegajosas; me quemé la lengua porque no podía esperar.
Cuando llegamos al Barrio Chino para el bánh xèo (esa crujiente tortita amarilla), ya estaba lleno pero con ganas de seguir probando. Nos reímos cuando intenté decir “bánh khọt” (Linh también se rió — parece que mi acento suena a “espina de pescado” si te equivocas). Paseamos por el mercado de flores Ho Thi Ky al atardecer; pétalos por todas partes bajo luces de neón, gente regateando en vietnamita y jemer. Había tantos platos — estofado de res con fideos de cristal, pizza vietnamita hecha en la calle — que perdí la cuenta después del brindis con cerveza Saigón (“¡Một hai ba dzô!”). Pero aún sueño con ese plátano con leche de coco.
Terminamos compartiendo flan en un antiguo edificio donde la abuela de alguien veía la tele al lado. Linh me apuntó direcciones para seguir explorando si me daba hambre otra vez (poco probable). Al dejarme en el hotel, sentí que nos conocíamos de mucho más que unas horas — supongo que eso pasa cuando recorres Saigón comiendo juntos.
Sí, la recogida y regreso gratis están incluidos para hoteles en los Distritos 1, 3 y 4.
El tour incluye 10 platos diferentes más bebidas como cerveza Saigón y jugo de coco.
No, irás como pasajero detrás de un guía experto y asegurado.
Sí, es apto para todas las edades e incluye seguro de accidentes hasta $5,000 por persona.
Platos como ensalada de papaya con carne seca, bánh xèo, plátano a la parrilla con leche de coco, estofado de res con fideos, pizza vietnamita, bánh khọt, sopa dulce o flan.
Después de reservar puedes avisar al operador sobre alergias o dietas especiales.
No se especifica el tiempo exacto, pero dura varias horas recorriendo varios distritos en moto.
Puedes encontrarte con tu guía en la Ópera de Saigón en lugar de usar la recogida en hotel.
Tu día incluye recogida y regreso gratis en hoteles céntricos (o encuentro en la Ópera de Saigón si prefieres), transporte en moto con guía individual para cada pasajero (casco y poncho si hace falta), seguro de accidentes hasta $5,000 por persona para tranquilidad; todos los platos —10 en total— más bebidas como jugo de coco y cerveza local; gel desinfectante o mascarillas si las pides; y direcciones para seguir explorando si aún tienes hambre.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?