Entra en una de las mayores fábricas de aceite de oliva de España cerca de Cazorla con una visita práctica: descubre molinos antiguos, pasea por jardines llenos de plantas autóctonas y degusta al menos tres aceites virgen extra con consejos de un guía local. Risas, sorpresas y una nueva forma de valorar cada botella después de esta experiencia.
Despiertas rodeado de verde por todos lados — es un verdadero mar de olivos que se extiende bajo la Sierra de Cazorla. Aún recuerdo ese leve aroma picante en el aire cuando nos acercamos a la entrada de la fábrica. Nuestro guía, Juan, nos saludó con una sonrisa y empezó a contarnos cómo su abuelo recogía las aceitunas a mano. Tenía esa forma de hablar que te hace sentir como si lo conocieras de toda la vida, aunque acabáramos de encontrarnos. El lugar vibraba con una energía tranquila — carretillas en el fondo, algunos trabajadores riendo cerca del patio de recepción. Nunca me había parado a pensar en todo el esfuerzo que hay detrás de una botella de aceite de oliva.
Recorrimos la planta de envasado (es enorme), y Juan nos fue señalando detalles que pasan desapercibidos — por qué algunos aceites llevan esa etiqueta especial, qué significa realmente “virgen extra” (no es solo marketing). En la zona del museo había un viejo molino de piedra; si te acercabas, aún podías oler un leve toque del prensado de la temporada pasada. El jardín exterior estaba lleno de hierbas silvestres y más variedades de aceitunas de las que imaginaba — ¿más de sesenta tipos? En un momento intenté pronunciar “picual” y Juan se rió sin parar. Mi acento tiene que mejorar.
La cata me sorprendió. Tres aceites virgen extra diferentes, acompañados de pequeños trozos de pan, y cada uno con un sabor distinto — herbáceo, intenso, casi afrutado. Alguien preguntó por las marcas del supermercado y Juan no se cortó; nos enseñó a leer las etiquetas para no volver a caer en engaños. No fue una clase aburrida, sino como si te contaran un secreto de familia. No dejo de pensar en ese instante en que todos nos quedamos en silencio tras probar el primer aceite — simplemente disfrutándolo juntos.
Sí, todas las áreas y superficies son accesibles para sillas de ruedas.
Probarás al menos tres aceites virgen extra diferentes.
Sí, la visita al olivo monumental es opcional durante el tour.
Sí, pueden acompañar con carrito o silla de paseo.
Sí, la entrada al museo y molino del siglo XX está incluida desde el inicio.
Sí, el guía te enseñará a leer etiquetas y seleccionar aceites de calidad.
Sí, los animales de asistencia están permitidos en toda la experiencia.
Tu día incluye acceso guiado por una de las mayores fábricas de aceite de oliva de España cerca de Cazorla — desde el patio de recepción y la zona de envasado hasta el museo y molino del siglo XX — además de una parada opcional en el olivo monumental, paseo por jardines con decenas de plantas autóctonas y una cata con al menos tres aceites virgen extra.
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