Camina por las brumosas terrazas de arroz del Valle Muong Hoa, visita aldeas Hmong con un guía local, comparte un té en casa de una familia y disfruta un almuerzo con vistas a las montañas. Prepárate para botas embarradas, risas amigables y momentos que se quedan contigo mucho después de volver a Sapa.
Alguien nos saluda desde la puerta antes de que siquiera me dé cuenta de que hemos llegado a la primera aldea Hmong. Nuestro guía, Tinh, sonríe y nos invita a entrar — zapatos fuera en el umbral (casi lo olvido). La casa huele a leña y a algo herbal que no logro identificar. Nos ofrecen tazas pequeñas de té verde, con un sabor a hierba y un toque amargo, pero justo lo que necesitábamos después de la subida. Tinh nos cuenta sobre el bordado de su abuela — señala las manchas índigo en sus dedos mientras trabaja junto a la ventana. Intento decir “gracias” en Hmong; todos ríen con cariño y lo repiten hasta que me acerco.
La caminata no es fácil pero tampoco dura — un paso constante, a veces embarrado. Pasamos por terrazas de arroz que se enroscan como cintas verdes en las laderas del Valle Muong Hoa. Hay un lugar desde donde se ve el monte Fansipan a lo lejos; las nubes se quedan atrapadas en su cima como si no quisieran irse. Me detengo demasiado tiempo tomando fotos y casi pierdo al grupo (Tinh me grita para que regrese). En un momento escuchamos a niños cantando detrás de una cerca de bambú — sus voces flotan sobre el valle, mezclándose con el sonido del agua que baja de un arroyo escondido.
El almuerzo es en un pequeño restaurante con vistas a más terrazas. Es sencillo: arroz, verduras salteadas y algo picante con cerdo. La vista es tan amplia que te deja en silencio por un momento — o quizá era yo recuperando el aliento. Luego bajamos hacia la aldea Hau Thao, donde un anciano teje cestas junto al camino y asiente al pasar. Mis botas están cubiertas de barro rojo y, sinceramente, ya no me importa; se siente parte del día.
No esperaba sentirme tan bienvenido por gente que nunca había visto antes. El clima cambiaba constantemente — sol un minuto, niebla al siguiente — pero eso hacía que todo se sintiera más vivo. Cuando el conductor nos recogió al final de la caminata, mis piernas estaban cansadas pero la cabeza más ligera que en semanas. A veces todavía pienso en ese primer sorbo de té.
La excursión de día completo empieza alrededor de las 8:45 a.m. y regresa a Sapa por la tarde.
Sí, se incluye la recogida en tu hotel en el centro de Sapa antes de comenzar la caminata.
Sí, recorrerás varias aldeas Hmong, incluyendo la aldea Hau Thao.
Sí, el almuerzo en un restaurante local está incluido durante la excursión.
Se recomienda tener un nivel de condición física moderado para esta ruta a pie.
Este tour no es aconsejable para personas con lesiones en la columna o problemas cardiovasculares.
Sí, hay opciones de transporte público cerca del centro de Sapa.
Tu día incluye recogida en el hotel de Sapa antes de comenzar la caminata con un guía local; agua embotellada durante el recorrido; un almuerzo tradicional en un restaurante con vistas al valle; y traslado de regreso a Sapa por la tarde, cuando tus piernas estén cansadas pero el corazón lleno.
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