Caminarás por los pasos de leyendas del montañismo, volarás al salvaje aeropuerto de Lukla, explorarás pueblos sherpas como Namche Bazaar, visitarás antiguos monasterios y despertarás con vistas al Everest que parecen de otro mundo. Este trekking no es solo llegar al campamento base, sino disfrutar cada instante del camino.
La primera vez que bajé de ese pequeño avión en el aeropuerto Tenzing Hillary de Lukla, sentí las piernas temblar, no solo por la altura, sino por la emoción. El aire tenía ese frescor cortante y se olía el humo de leña que salía de las casas de té. Nuestro guía, Pasang, sonreía mientras señalaba el estrecho sendero que subía entre pinos. Aquí no se trata solo del Everest, toda la región del Khumbu está llena de historias vivas.
Namche Bazaar me sorprendió como una explosión de color después de horas de caminos rocosos. Tiendas con queso de yak y imitaciones de ropa North Face llenan las empinadas calles. Nos metimos en un café para tomar un dulce té con leche, que los locales llaman “chiya”, y vimos a porteadores cargando cestas que parecían el doble de ellos. El Museo Sherpa está justo arriba del pueblo; es pequeño pero está lleno de fotos antiguas y equipo de las primeras expediciones. Si tienes suerte, coincidirás con el día de mercado, cuando comerciantes de todo lado se reúnen y el lugar se llena de vida y charla.
Una mañana salimos temprano hacia el monasterio de Tengboche. El sendero estaba en silencio salvo por el lejano sonido de campanas y el paso de yaks cargados. Al llegar, los monjes cantaban dentro, con voces bajas y constantes, mientras las banderas de oración ondeaban al viento. El Ama Dablam se alzaba justo detrás, casi al alcance de la mano. Desayunar en el Everest View Hotel fue algo surrealista; tomar café mientras las nubes se movían alrededor del Everest es un recuerdo que jamás olvidaré.
El trekking requiere buena condición física y algo de preparación para la altura. Es exigente pero manejable si estás sano y vas con calma.
Tu tarifa cubre los permisos del Parque Nacional Sagarmatha, impuestos aeroportuarios y las noches de alojamiento durante la ruta.
En algunos alojamientos hay Wi-Fi limitado (con costo), pero no esperes cobertura en todas partes, especialmente en las zonas más altas.
Tu viaje incluye las entradas al parque nacional, impuestos de aeropuerto para vuelos a Lukla y todos los alojamientos durante el trekking. Lo demás, como comidas o snacks extra, se puede conseguir fácilmente en las casas de té locales.
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