Recorre los campos de agave de Jalisco con un Maestro de Tequila que te guiará en catas exclusivas dentro de una bodega VIP. Disfruta un desayuno en El Arenal, visita destilerías boutique, prueba tequilas y mezcales premium, y termina con mariachi en vivo en Amatitán antes de regresar lleno y quizás un poco cambiado.
“Nunca volverás a probar el tequila igual,” sonrió nuestro guía mientras me pasaba ese vasito pequeño—la verdad, creía saber cómo debía saber el tequila. Pero ahí, en esa bodega VIP fresca y oscura entre Amatitán y Tequila, olía a algo dulce y terroso, como lluvia sobre polvo. El Maestro (es uno de solo 90 en todo el mundo—no sabía que existía eso) nos guió por ocho catas diferentes. Tenía una forma de girar la copa y hacer una pausa para que realmente captáramos el aroma—al principio casi a hierba, luego con un toque ahumado. Intenté describirlo y terminé riéndome de mí mismo. El desayuno en El Arenal ya parecía de hace mil años, pero el café ahí era tan fuerte que me mantuvo despierto para todo.
Viajamos en un SUV negro con botellas de agua fría rodando bajo los asientos (y sí, cerveza si querías), con las ventanas abajo para sentir la brisa. Pasando entre campos de agave azul bajo un cielo enorme—no dejaba de pensar en lo diferente que es la luz aquí. En la segunda destilería en Amatitán, nuestro guía explicó cómo su proceso cambiaba todo el sabor; aún recuerdo cuando dijo “la paciencia hace mejor tequila” mientras tocaba uno de esos grandes barriles de madera. El almuerzo en el pueblo de Tequila no estaba incluido, pero valió cada peso—un chile relleno que me dejó los labios dormidos por horas. Después hubo tiempo para pasear; viejitos jugando cartas afuera de una tienda, música de banda sonando desde algún lugar en la calle.
La última parada fue un bar donde el mariachi en vivo aparece de repente—un minuto estás tomando mezcal, y al siguiente todos cantan (yo para nada afinado). Li, de nuestro grupo, intentó pedir una canción y pronunció mal el nombre; hasta el bartender se rió. Fue ruidoso, caótico y perfecto. De regreso, vi cómo el atardecer caía sobre los campos de agave y me di cuenta que llevaba horas sin pensar en trabajo, correos o cualquier otra cosa—todavía a veces recuerdo esa vista.
Sí, incluye un desayuno fresco en un restaurante mexicano en El Arenal.
Probarás ocho tequilas y mezcales premium durante la visita a la bodega VIP.
El tour incluye traslado en SUV de lujo con aire acondicionado; confirma el punto exacto al reservar.
Sí, las entradas a las dos destilerías de tequila están incluidas.
No, el almuerzo en uno de los mejores restaurantes de Tequila no está incluido.
No, este tour no es recomendado para niños.
Al reservar, deberás proporcionar nombre, peso, estatura y fecha de nacimiento para organizar tu vehículo.
Tu día incluye traslado en SUV de lujo con aire acondicionado y agua fría o cerveza a bordo, desayuno mexicano fresco con café o té en El Arenal, catas exclusivas de tequilas boutique guiadas por un Maestro certificado dentro de una bodega VIP privada (con entradas incluidas), tiempo para explorar las tiendas de Tequila y cerrar con música en vivo de banda o mariachi antes de regresar relajado—y quizá un poco alegre.
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