Recorre en quad los palmerales y senderos del desierto en Marrakech, para a tomar té de menta en una aldea bereber y vive la hospitalidad local, con recogida fácil en tu hotel.
La mañana comenzó fresca cuando nuestro conductor llegó justo frente al riad, sin tener que buscar puntos de encuentro. Aún medio dormido, sentía cómo la ciudad ya despertaba con vida. Tras un corto trayecto, llegamos a las afueras de Marrakech, donde filas de quads esperaban bajo un cielo polvoriento. Nuestro guía, Youssef, nos entregó cascos y gafas; incluso me enseñó a atarme el pañuelo para que la arena no entrara por todas partes (créeme, funciona).
Al encender los motores, la diversión empezó de verdad. Los quads levantaban pequeñas nubes de polvo mientras atravesábamos senderos rocosos y amplias zonas de palmerales. De vez en cuando se olía alguna hierba silvestre o veías cabras moviéndose entre la vegetación. Paramos varias veces para hacer fotos, imposible resistirse a esas vistas con el Atlas asomando en la distancia. A mitad del recorrido, Youssef nos llevó por un camino secundario hasta una pequeña aldea bereber. Fue un momento de calma total, donde solo se oían pájaros y la música suave que salía de una casa de adobe cercana.
Nos sentamos sobre alfombras tejidas y disfrutamos de un té de menta caliente mientras charlábamos con nuestros anfitriones. El té era dulce y fuerte, justo lo que necesitábamos tras el polvo del camino. Vi una tetera vieja calentándose sobre brasas en un rincón, que le daba un aroma ahumado y acogedor al lugar. Luego regresamos por senderos arenosos, con la sensación de haber descubierto un Marrakech que pocos turistas conocen. Cuando nos dejaron de nuevo en la puerta, todavía tenía arena en los zapatos y una sonrisa que no se borraba.
¡Claro! Los guías explican todo con detalle antes de empezar, así que no necesitas experiencia. Te ayudarán a sentirte seguro en el quad.
Usa ropa cómoda que no te importe que se ensucie de polvo. Lo mejor son zapatos cerrados. Los pañuelos son útiles para protegerte de la arena; si olvidas el tuyo, te lo facilitarán.
Sí, harás una parada en una auténtica aldea bereber para tomar té de menta y charlar con la gente del lugar. Es uno de los mejores momentos del tour.
La recogida se ofrece en la mayoría de hoteles y riads dentro de Marrakech. Si estás más lejos, solo pregunta y harán lo posible por organizarlo.
El tour incluye recogida y regreso a tu hotel o riad en Marrakech, todo el equipo de seguridad (casco, gafas), alquiler del quad con combustible, guía local experto durante toda la ruta, paradas para fotos y una pausa para té o café tradicional en una aldea bereber. Solo tienes que presentarte listo para la aventura.
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