Amasa pasta bajo el techo de un antiguo trullo y aprende a dar forma a las orecchiette con la guía de una cocinera local. Recoge hierbas frescas del jardín, comparte historias durante un almuerzo de tres tiempos con vino regional y siente cómo el ritmo tranquilo de Puglia se instala en ti.
¿Conoces esa sensación de entrar a una casa y que lo primero que hueles sea pan recién hecho o tomates cocinándose a fuego lento? Así empezó nuestro día en Puglia, no en una cocina enorme, sino justo afuera de un trullo, esas casitas blancas y redondas que ves en las postales. Nuestra anfitriona, Anna, nos recibió con las manos llenas de harina y me di cuenta de que nunca antes había hecho pasta desde cero. Se rió de mi primer intento (las orecchiette parecían más sombreritos que orejas), pero no paraba de decir “piano, piano” — despacio. El viento se llevaba la harina por todos lados. Todavía la encuentro en mi bolso de la cámara.
Recorrimos el jardín para recoger hierbas silvestres — menta y algo que Anna llamó cicorielle, que seguro pronuncié mal tres veces. Había tomates calentitos por el sol y unos melones pequeños que sabían más dulces de lo que parecían. El almuerzo se armó con lo que recogimos: orecchiette con salsa (yo elegí la vegetariana), un pan especial llamado frisa que absorbe el aceite de oliva como una esponja, y rollitos de carne para los demás. Siempre había vino en la mesa — tinto local, un poco rústico pero perfecto para el lugar.
En un momento Anna contó historias de su abuela haciendo pasta los domingos, cómo todos se reunían alrededor de esa misma tabla de madera. La luz se colaba entre los olivos y yo me quedé sentado masticando despacio, pensando en cómo aquí el tiempo parece ir a otro ritmo. Después del café (lo suficientemente fuerte para despertar hasta a tus antepasados), nos quedamos sin prisas — nadie nos apuraba para irnos. Aún recuerdo esa vista desde la puerta del jardín.
La clase se lleva a cabo en un trullo tradicional cerca de Alberobello, en Puglia.
La experiencia completa dura unas 4.5 horas, incluyendo el tiempo para comer.
Sí, incluye un almuerzo de tres tiempos basado en lo que prepares.
Sí, hay opciones vegetarianas, veganas, sin gluten y sin lactosa si las pides al reservar.
No, todos los ingredientes y utensilios están incluidos.
Puedes estacionar en el lugar; el transporte público está cerca pero no está incluido.
Harás pasta orecchiette con salsa (de carne o vegetal), además de aperitivos y guarniciones de temporada.
Sí, los niños son bienvenidos y pueden participar en todas las actividades.
Tu día incluye todos los ingredientes y utensilios para cocinar, instrucción práctica de una anfitriona local dentro de su trullo, una breve caminata para conocer la historia de la arquitectura de los trulli si te interesa, y un almuerzo relajado de tres tiempos con tus orecchiette hechas a mano (con salsa de carne o vegetal), aperitivos como frisa o acqua sala, verduras de temporada del jardín, fruta recién recogida si está lista para comer, café o té al final — y mucho vino tinto regional durante la comida. Hay estacionamiento en el lugar; se pueden adaptar las dietas especiales si avisas con anticipación.
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