Recorrerás las calles históricas de Milán con una guía local, probando pasteles delicados, risotto alla milanese cremoso, porciones de pizza fresca y ricos cannoncini en Brera. Risas durante la comida, historias sobre el azafrán y debates de fútbol que llegan desde mesas cercanas. Esto no es solo comida, es Milán mostrándote su esencia.
Antes de darme cuenta, alguien me pasa un tenedor pequeñito — resulta que es para el cake mignon que tengo frente a mí, brillante y perfecto. Nuestra guía, Elena, sonríe y nos cuenta que las mañanas en Milán suelen empezar con algo dulce. Normalmente no soy de desayunar postre, pero este pastelito desaparece antes de que pueda pensarlo. El aroma de esa pastelería — mantequilla, café, ¿quizás un toque de almendra? — se queda conmigo mientras volvemos a la calle.
Pasear por el centro histórico con Elena se siente más como acompañar a una amiga que hacer un “tour gourmet por Milán”. Ella señala detalles que yo jamás habría notado — cómo los señores doblan el periódico en el bar, o cómo el azafrán se pesa como si fuera oro (me reí, pero iba en serio). Luego llega el risotto alla milanese. De un amarillo dorado, cremoso pero ligero, y siendo sincero, no esperaba que me gustara tanto. Comerlo en un restaurante antiguo donde todos parecen conocerse le da un toque especial.
También probamos pizza — más fina que la que suelo comer en casa, con los bordes apenas quemados, justo como debe ser. Alguien detrás discute suavemente sobre fútbol; entiendo un par de palabras, pero los gestos lo dicen todo. Después llegan los embutidos y quesos (que sigo sin recordar los nombres), salados, suaves y con un punto fuerte a la vez. Ya estoy lleno, pero cuando Elena trae unos cannoncini rellenos de crema, nadie dice que no. El último bocado es dulce y pegajoso, y aún lo saboreo horas después.
El tour es una caminata por el centro de Milán; la duración exacta depende de las paradas y el ritmo del grupo.
Sí, incluye una comida gourmet completa repartida en varias paradas durante el recorrido.
Sí, las degustaciones se hacen tanto en Brera como en el centro histórico de Milán.
Se ofrece agua embotellada para todos y una bebida alcohólica para mayores de 18 años.
El tour acepta solo grupos pequeños para asegurar atención personalizada de la guía.
Probarás pasteles (como cake mignons), risotto alla milanese, pizza, embutidos y quesos, además de cannoncini.
El tour se realiza siempre en inglés e italiano; otros idiomas pueden estar disponibles bajo petición.
Sí, hay opciones de transporte público cerca del inicio del tour.
Tu día incluye degustaciones guiadas en pastelerías y restaurantes seleccionados del centro de Milán y Brera; todos los platos forman parte de una comida abundante. Agua embotellada en cada parada y una bebida alcohólica para adultos. Los grupos son pequeños para que disfrutes tiempo real con tu guía local experto en gastronomía durante todo el paseo.
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