Volarás alto sobre la jungla de Ubud, probarás chocolate fresco en una fábrica local y te refrescarás en la cascada Nungnung, todo en un día fácil con transporte privado y almuerzo incluido.
Salimos del hotel justo después del desayuno, el aire aún fresco y con un poco de neblina. El camino hacia Bongkasa nos llevó entre interminables campos de arroz; algunas personas ya estaban trabajando en las parcelas, saludándonos al pasar. Nuestro conductor señaló un pequeño puesto a la orilla del camino que vendía agua de coco fresca; lo anoté mentalmente para la próxima vez. Cuando llegamos a My Swing Bali, el sol comenzaba a asomarse entre las nubes y se podía escuchar el río abajo antes incluso de verlo.
Los columpios aquí no son solo para la foto: hay cinco diferentes, cada uno con su propia vista sobre la jungla y el río Ayung. Probé primero el más alto (las piernas me temblaban al despegar), pero una vez arriba, solo sentís el viento en el cabello y un mar de verde alrededor. También hay un columpio para parejas si no vas solo, además de unos nidos tejidos donde todos hacen fila para las fotos. Nuestro guía estuvo encantado de sacar fotos; conocía todos los mejores ángulos.
El almuerzo fue sencillo pero delicioso: satay de pollo local con arroz en su restaurante al aire libre con vistas a los árboles. De fondo, se escuchaban los cantos de los pájaros desde el valle mientras comíamos. Después, nos dirigimos a la fábrica de chocolate POD. Cerca pastaban elefantes (¡no lo esperaba!), y dentro pudimos ver cómo elaboran el chocolate desde cero, con muchas muestras para probar.
La última parada fue la cascada Nungnung. Aviso: son 500 escalones para bajar (y luego subir), así que lleva buen calzado y quizá ropa extra si quieres nadar. El sonido se va haciendo más fuerte a medida que bajas; al llegar al fondo, es casi ensordecedor, pero de una forma maravillosa. Casi no había nadie cuando fuimos, solo un par de locales tomando fotos y un vendedor de agua embotellada en la cima. Pasamos cerca de una hora allí antes de regresar, con las piernas cansadas pero totalmente valió la pena.
¡Sí! Los niños pueden participar siempre que estén acompañados por adultos. Algunos columpios tienen restricciones de altura por seguridad, pero hay muchos lugares para fotos también.
Son unos 500 escalones para bajar (y luego subir). Es manejable si vas con calma; solo usa zapatos cómodos y lleva agua.
Sí, todas las entradas están cubiertas en el precio, incluyendo My Swing Bali y la cascada Nungnung.
¡Claro! El agua es fresca y refrescante; solo ten cuidado con las rocas resbaladizas cerca de la cascada.
Esta excursión privada incluye recogida y regreso al hotel, todas las entradas (incluyendo Bali Swing), almuerzo con vistas a la jungla, degustación de chocolate en la fábrica POD, transporte de ida y vuelta en vehículo privado, además de impuestos y cargos ambientales. Solo trae calzado cómodo y quizá ropa extra si planeas nadar.
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