Remarás en aguas tranquilas desde Babin Beach con un guía local, te deslizarás bajo túneles de manglar en Grand Cul-de-Sac Marin, verás fauna de cerca y terminarás con una limonada casera en una cala escondida. Disfruta momentos simples: risas cuando alguien se tambalea, el sol en la piel, y pausas de silencio, todo a tu ritmo.
No esperaba que Babin Beach estuviera tan tranquila. Acabábamos de dejar la carretera principal atrás y de repente solo se escuchaba el suave chapoteo del agua contra las tablas y algunos pelícanos observándonos desde la orilla. Nuestro guía, Yannick, sonrió al darme el remo. “No te preocupes,” dijo, “si te caes, el agua está calentita.” Al principio me tambaleé (las piernas me temblaban como gelatina), pero tras unos intentos le fui pillando el truco al paddle. El agua aquí es increíblemente clara — si miras hacia abajo, verás pececitos nadando justo bajo tus pies.
Cuando todos encontramos el equilibrio, Yannick nos llevó hacia el Islote Macou. No está lejos — unos 20 minutos de remo suave — pero todo cambia al entrar en el manglar. El aire se vuelve quieto y huele a tierra salada, casi dulce en algunos rincones. Nos metimos bajo esos túneles verdes donde la luz se cuela entre hojas y raíces que se hunden en el agua. Yannick se detuvo para señalar pequeños cangrejos que corrían de lado por las ramas (los nombraba en criollo; intenté repetir uno y se rió). Nos explicó cómo los manglares protegen el Grand Cul-de-Sac Marin de las tormentas y por qué albergan tantas criaturas curiosas que nunca había notado.
Me encantó poder entrar en esos espacios estrechos donde los barcos no llegan — se sentía privado, pero no solitario. Hubo un momento en que todos dejamos de remar y solo escuchamos: pájaros charlando en lo profundo, algo cayendo al agua cerca, hasta el viento sonaba distinto aquí. Tras serpentear por lo que Yannick llamó “túneles de plantas,” llegamos a una cala diminuta que habría pasado de largo si parpadeaba. Sacó un termo con limonada casera (ácida y fresquita — perfecta después de tanto sol) y nos sentamos en las tablas con los pies colgando en el agua.
De vez en cuando recuerdo ese silencio en el manglar — lo cerca que se sentía todo, aunque flotábamos con extraños que pronto dejaron de serlo. Si buscas una descarga de adrenalina fuerte, quizá no sea para ti… pero si quieres sentir Guadalupe de verdad durante una mañana, este paseo en paddle vale cada minuto.
Sí, los principiantes son bienvenidos y recibirán instrucciones de un guía cualificado antes de comenzar.
El tour empieza en Babin Beach, en Guadalupe.
Se tarda unos 20 minutos de remo suave desde Babin Beach hasta el Islote Macou.
Los niños menores de 12 años pueden unirse montando en la tabla de sus padres o del instructor.
El precio incluye alquiler de tabla de paddle con leash, fotos durante el recorrido y limonada casera en la pausa.
No, no se incluye almuerzo; solo limonada casera durante la parada en la cala.
Este tour no se recomienda para personas con lesiones de columna, embarazadas o con problemas cardiovasculares.
Tu día incluye todo el equipo: tabla de paddle con leash y remo, además de fotos tomadas por tu guía durante el paseo. Tras explorar juntos los manglares del Grand Cul-de-Sac Marin, harás una pausa para disfrutar limonada casera servida en tu tabla antes de regresar a la orilla.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?