Recorre el Puerto Viejo de Marsella en este tour a pie, probando camembert asado, panisses con alioli, dulces locales como calissons y turrón, y pasteles típicos. Ríe con tu guía y siente la Provenza más cerca que nunca, especialmente cuando alguien comparte su receta o historia familiar durante el postre.
Lo admito, creía que conocía la comida francesa, pero Marsella tiene su propio estilo. La primera parada fue un pequeño local cerca del Vieux Port donde nuestra guía, Camille, nos ofreció camembert asado a la provenzal. Estaba cremoso, lleno de hierbas, y la verdad, terminé con queso en los dedos intentando recogerlo con un trozo de pan. Camille sonrió y dijo que así es como sabes que lo estás haciendo bien aquí. El aire salado del mar entraba desde el puerto, casi podías saborearlo junto con el queso.
Recorrimos calles estrechas (perdía la noción de dónde estaba el norte) y acabamos en una brasserie que parecía el salón de alguien, pero con grifos de latón y bufandas antiguas del equipo de fútbol de Marsella colgadas en la pared. Probamos panisses — unas croquetas crujientes de garbanzo — con una cucharada de alioli con ajo que me hizo lagrimear un poco (pero para bien). En otra mesa alguien empezó a cantar suavemente en francés; no entendí las palabras pero me sacó una sonrisa. Este tour gastronómico por Marsella no dejaba de sorprenderme — cada bocado era distinto a lo que había probado en París o Lyon.
Después entramos en una pequeña tienda para probar calissons y turrón. La mujer detrás del mostrador nos dejó probar un poco de cada uno — pasta de almendra con melón confitado para el calisson, turrón suave con trozos de nueces. Nos contó cómo su abuelo hacía dulces en tiempos de guerra cuando el azúcar escaseaba. Cada vez que veo calissons, me acuerdo de esa historia. Ah, y también había pasteles — hojaldres pegajosos espolvoreados con azúcar glas; no recuerdo su nombre, pero a esas alturas nadie le prestaba atención.
Me fui lleno (quizá demasiado), pero también con una conexión con Marsella que no esperaba. Si buscas algo auténtico — no solo probar platos, sino escuchar historias mientras comes — este tour es para ti.
El tour dura aproximadamente medio día y se realiza caminando por el casco antiguo.
Sí, la comida está incluida a través de varias paradas para degustar durante el recorrido.
Probarás camembert asado a la provenzal, panisses con alioli, sardinas, calissons, turrón y varios pasteles.
Sí, contarás con un guía local experto que compartirá historias sobre cada plato y lugar.
Se ofrece agua en cada parada del recorrido.
¡Claro! Los bebés pueden ir en cochecito o silla de paseo; también hay asientos especiales para bebés si se necesitan.
Por favor, contacta antes de reservar para comentar cualquier alergia o restricción alimentaria.
El guía puede hablar tanto inglés como francés durante la experiencia.
Tu día incluye un paseo guiado por el casco antiguo de Marsella con varias paradas para degustar — camembert asado a la provenzal, panisses con alioli, dulces locales como calissons y turrón — además de agua en cada parada y suficientes degustaciones para considerar la comida completa antes de volver a las animadas calles del puerto.
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