Te lanzas directo a la aventura en los rápidos salvajes del río Petrohué cerca de Puerto Varas, guiado por locales que conocen cada curva del río. Prepárate para nadar en aguas heladas, reír con snacks y cerveza fría después del recorrido, y disfrutar de transporte privado para que solo te enfoques en la emoción y esos momentos de calma absoluta.
¿Conoces esa sensación de estar de repente completamente despierto, con el corazón latiendo a mil? Así empezó para mí—de pie en la orilla rocosa del río Petrohué, casco un poco torcido, chaleco bien ajustado. Nuestro guía, Felipe, sonrió y preguntó si alguien tenía dudas. Casi levanto la mano (el río se veía mucho más intenso que en las fotos), pero luego soltó un chiste sobre las “lavadoras chilenas” y todos nos reímos. El aire olía a piedra mojada y a agujas de pino—un aroma fresco y punzante. Podía oír los rápidos antes de verlos.
El primer tramo fue rápido—muy rápido. El agua me golpeaba la cara fría y brillante; perdí la cuenta de cuántas veces grité sin querer. En un momento giramos de lado y Felipe gritó “¡Remen a la izquierda!” en una mezcla de español e inglés. De verdad pasamos un rápido clase IV sin que nadie cayera (aunque juro que se me resbaló un pie). También hubo partes más tranquilas—agua verde y lisa donde se veían las piedras al fondo. Paramos para nadar un rato; la verdad, el agua estaba helada pero se sentía raro pero bien después de tanta adrenalina.
Cuando sacamos la balsa a la orilla, alguien me dio un snack local—algo dulce con un toque de canela—y una cerveza fría que sabía mejor que cualquier otra que haya tomado en mucho tiempo. Todos estábamos con la piel sonrojada por el sol y medio aturdidos; había una sonrisa compartida entre todos, aunque la mayoría no nos conocíamos antes de ese día desde Puerto Varas. El viaje de vuelta fue tranquilo, solo charlas suaves y el sonido del equipo mojado rozando los asientos. A veces todavía pienso en esa luz del río reflejándose en el agua—¿sabes?
La actividad completa dura unas 5 horas, incluyendo traslados y pausas para snacks.
Sí, el transporte privado está incluido para tu comodidad.
Navegarás rápidos clase III y IV en el río Petrohué.
Incluye un snack local y una cerveza fría después del rafting.
Sí, hay oportunidad de nadar en aguas claras en tramos más tranquilos.
El tour es apto para todos los niveles físicos, pero no se recomienda para ciertas condiciones de salud.
Te entregan todo el equipo necesario, incluyendo casco y chaleco salvavidas.
Sí, hay opciones de transporte público cerca del punto de encuentro.
Tu día incluye transporte privado desde Puerto Varas al río Petrohué y regreso, todo el equipo necesario para navegar con seguridad en rápidos clase III/IV, tiempo para nadar en aguas cristalinas si quieres, un snack local dulce al borde del río después de la aventura y, por supuesto, una cerveza fría antes de volver a casa empapado pero feliz.
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