Nadarás justo al borde de las Cataratas Victoria en Devil’s Pool, en Livingstone Island, acompañado por guías locales que conocen cada roca y corriente. Disfruta un desayuno completo tras el baño y contempla vistas que pocos tienen la suerte de ver — una experiencia que recordarás cada vez que escuches el sonido del agua.
Para ser sincero, casi me echo para atrás cuando llegamos al borde de Livingstone Island. El ruido de las Cataratas Victoria es tan fuerte que vibra en el pecho, y la niebla hace que todo parezca un poco irreal. Nuestro guía, Joseph, sonrió y nos dijo que no nos preocupáramos — “la roca es más fuerte de lo que parece,” aseguró. Aún así dudé antes de deslizarme en Devil’s Pool, pero el agua estaba más cálida de lo que esperaba, arremolinándose alrededor de mis piernas mientras el río rugía a solo unos centímetros. Mi corazón latía rápido — pero de la buena manera, creo.
Hay un momento en que miras por el borde y solo ves aire y rocío abajo. Es difícil de explicar — ¿una mezcla de miedo y asombro? Joseph se rió cuando pegué un pequeño grito (no estoy orgulloso), y luego señaló cómo la repisa te mantiene seguro. Incluso se ofreció a sacar fotos con mi móvil, algo que agradezco porque mis manos temblaban demasiado para sostenerlo firme. Después, nos sentamos a desayunar justo ahí en la isla — huevos, tostadas y un café que sabía aún más fuerte después de tanta adrenalina. El sol apareció justo cuando terminamos, y todo olía a piedra mojada y algas del río.
No esperaba sentir tanta calma después de nadar en Devil’s Pool. Quizá fue alivio o simplemente estar rodeado de toda esa agua salvaje — de cualquier forma, me sorprendí sonriendo sin motivo mientras nos secábamos. Había un par de familias con niños en cochecitos (¡nunca pensé que sería accesible para sillas de ruedas!), charlando en voz baja mientras los guías les ayudaban a cruzar las rocas. Fue una sensación extraña, casi como una comunidad en un lugar tan intenso. Aún ahora, cuando escucho agua correr en casa, recuerdo lo cerca que estuvimos del borde — y lo seguro que me sentí con Joseph allí.
Sí, el desayuno está incluido durante la visita a Livingstone Island y Devil's Pool.
Sí, hay opciones de transporte y todas las áreas son accesibles para sillas de ruedas.
Sí, los bebés pueden participar; deben sentarse en el regazo de un adulto o usar asientos especiales para bebés.
Sí, los animales de servicio están permitidos durante la experiencia.
El tour incluye acceso desde Livingstone hasta Livingstone Island, donde se encuentra Devil's Pool.
Sí, hay opciones de transporte público cerca del lugar de salida.
Tu mañana incluye recogida desde enlaces de transporte cercanos si es necesario, nado guiado en Devil’s Pool con apoyo de guías locales, y un desayuno completo servido en Livingstone Island antes de regresar a la ciudad.
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