Recorre las calles silenciosas de Pripyat, acércate al Reactor 4 con un guía experto que comparte historias reales y visita Duga-3 en medio del bosque. Incluye recogida en hotel, transporte privado y almuerzo local—una experiencia que no olvidarás tras dejar Chernóbil atrás.
Ya estábamos fuera de Kyiv cuando el cielo empezó a ponerse pesado, algo gris pero sin amenaza real de lluvia. Nuestra guía, Oksana, nos entregó unos pequeños dosímetros y nos dijo: “No se preocupen, es seguro.” El camino hacia la Zona de Exclusión de Chernóbil se sentía extrañamente silencioso. Hay un control donde te piden el pasaporte (lo revisan dos veces) y de repente estás en un lugar que no se parece a nada que haya visto antes.
La primera parada fue la central nuclear de Chernóbil. Nos quedamos a una distancia segura del Reactor 4, ese que tiene toda la historia, y Oksana nos contó sobre aquella noche de 1986 que cambió todo. Se puede ver el nuevo sarcófago que cubre el reactor antiguo; es enorme y tiene un aire inquietante con la luz de la mañana. La verdad, no esperaba sentirme tan pequeño parado ahí. En el aire había un leve olor metálico, o quizás solo eran mis nervios.
Después del almuerzo (comida sencilla ucraniana—borsch y pan negro, nada sofisticado pero muy reconfortante), seguimos hacia Pripyat. Al caminar por esos bloques de apartamentos vacíos y los parques oxidados, no podía dejar de pensar en las familias que se fueron de prisa. Oksana señaló unos murales descoloridos en la pared de una escuela y dijo: “Aquí jugaban los niños todos los días.” Ahora la hierba crece por todas las grietas; la naturaleza ha tomado el control.
También visitamos Duga-3, el famoso “Pájaro Carpintero Ruso”, un radar gigante escondido en el bosque que cruje cuando sopla el viento. De regreso pasamos por el Bosque Rojo; Oksana explicó cómo algunos árboles aún crecen con formas extrañas por lo que pasó aquí. Todo el día fue una mezcla de surrealismo y realidad.
Sí, los tours siguen estrictas normas de seguridad y solo visitan áreas aprobadas con niveles seguros de radiación. Los guías llevan dosímetros para mayor tranquilidad.
Visitarás el Reactor 4 de la central nuclear, recorrerás la ciudad fantasma de Pripyat, verás la estación radar Duga-3 y pasarás por el Bosque Rojo, todo con un guía local.
Debes reservar con al menos cinco días de anticipación por los permisos; lleva tu pasaporte válido el día del tour para los controles de entrada.
Sí, el tour privado incluye un almuerzo sencillo típico ucraniano durante la experiencia.
Tu día completo incluye recogida y regreso al hotel en Kyiv, todos los permisos para entrar a la Zona de Exclusión, transporte privado con un guía local experto durante todo el recorrido y un almuerzo tradicional ucraniano antes de volver a la ciudad.
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