Camina por las calles de mármol de Éfeso con un grupo pequeño y guía local, entra en la Biblioteca de Celso, visita la tranquila Casa de la Virgen María y descubre lo que queda del Templo de Artemisa. Incluye recogida en hotel en Kusadasi o Selcuk y un almuerzo turco sencillo. Momentos que recordarás mucho tiempo después.
No esperaba que el mármol se sintiera tan fresco al tacto, incluso con el sol brillando. Acabábamos de entrar por las antiguas puertas de Éfeso después de que nuestra guía, Ayşe, nos recogiera en el hotel de Selcuk (llegó justo a tiempo, lo que alegró a mi pareja). La ciudad es enorme, mucho más grande de lo que imaginaba. Caminando por la Calle de Mármol, aún se ven las marcas de las ruedas de los carros antiguos. Ayşe señaló unas tallas desgastadas de Nike en una piedra y bromeó diciendo que ahí nació el logo de Nike, algo que nunca había escuchado antes. Hay algo especial en escuchar estas historias estando justo ahí, que las hace inolvidables.
Paramos en la Biblioteca de Celso e intentamos imaginar a 250,000 personas viviendo allí en su día, es impresionante. El anfiteatro es gigante; me dieron ganas de probar la acústica, pero al final no me atreví. Después de recorrer las ruinas (y esquivar algunos palos de selfie), nos dirigimos a la Casa de la Virgen María. El ambiente cambió por completo: pinos y un aroma a incienso en el aire, todo se sentía más tranquilo. La gente ataba cintas en una pared para pedir deseos; yo también escribí uno, aunque no sé en qué idioma quedó. El almuerzo fue en un local cercano: arroz pilaf y pollo a la parrilla, sencillo pero justo lo que necesitábamos tras tanto caminar.
El Templo de Artemisa apenas conserva una columna sobre un terreno pantanoso; me sorprendió lo poco que queda de una de las siete maravillas. Sin embargo, ver cigüeñas anidando en lo alto le daba vida de otra manera. De regreso, paramos en un pueblo de tejido de alfombras; ver a las mujeres anudando hilos de seda era hipnótico. Intenté hacerlo un par de segundos y me di cuenta de lo difícil que es. Mis manos aún olían a lana cuando volvimos a la furgoneta. Así que sí, si estás pensando en un tour en grupo pequeño a Éfeso desde Kusadasi o Selcuk, te lo recomiendo si quieres vivir la historia de cerca y de forma auténtica.
Sí, incluye recogida y regreso en hoteles de Kusadasi o Selcuk.
Se recorren las ruinas de Éfeso, la Casa de la Virgen María, el Templo de Artemisa, la mezquita Isabey y un pueblo de tejido de alfombras.
Sí, el almuerzo está incluido en la excursión.
No, las entradas a Éfeso (40 €) y a la Casa de la Virgen María (500 TRY) se pagan directamente al guía para evitar colas.
Es un tour en grupo pequeño para una experiencia más personalizada.
Sí, la recogida está disponible en hoteles de ambas ciudades.
Sí, el tour es adecuado para cualquier nivel de condición física.
Sí, se permiten bebés, pero deben ir en el regazo de un adulto durante el transporte.
Tu día incluye recogida y regreso en hoteles de Kusadasi o Selcuk en un vehículo privado con aire acondicionado y seguro; contarás con un guía local profesional que te acompañará en cada sitio y disfrutarás de un almuerzo turco antes de regresar.
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