Camina por las tierras Chagga para nadar bajo las cataratas Materuni, prueba café recién hecho por los locales y relájate en las aguas termales Kikuletwa, todo acompañado por un guía que conoce cada atajo y historia del camino.
Salimos temprano de Moshi, con una bruma fresca que cubre el camino y un leve aroma a tierra mojada tras la lluvia de anoche. Nuestro guía, Joseph, nos cuenta sobre su infancia en la tribu Chagga mientras subimos hacia el pueblo Materuni. El trayecto es corto, unos 30 minutos, pero el paisaje cambia: platanales, cafetales, niños saludando desde la orilla. En la oficina del pueblo, una mujer con un colorido kitenge nos entrega las entradas y sonríe cuando intento hablar un poco de suajili.
La caminata hasta las cataratas Materuni no es difícil, pero despierta todos tus sentidos: el barro cruje bajo los pies y los pájaros cantan desde lo alto. Joseph señala árboles de aguacate silvestre y nos muestra cómo usan ciertas hojas para preparar té. Las cataratas son impresionantes: altas y rugientes, con una bruma que refresca antes de acercarte. Primero mojo los pies (¡el agua está helada!) y luego me adentro. Siempre hay risas y fotos bajo el chorro de agua.
Después de secarnos al sol, nos sentamos a un almuerzo sencillo: arroz pilau con frijoles y una botella de cerveza Kilimanjaro (sabe mejor aquí que en cualquier otro lugar). Alguien del pueblo nos enseña a tostar café al fuego abierto; lo molimos a mano y lo bebemos negro, aún caliente. Luego volvemos al van para un viaje de una hora más hasta las aguas termales Kikuletwa. El camino se vuelve polvoriento y de vez en cuando cruzan cabras.
Kikuletwa es un rincón secreto: una piscina de agua azul clara rodeada de raíces de higuera y palmeras. Se oyen niños chapoteando a un lado y alguien tocando guitarra cerca. El agua está tibia, perfecta para relajarse tras el baño frío en la cascada. Si te recuestas, puedes ver el Kilimanjaro asomando entre los árboles, si el cielo está despejado. Nos quedamos hasta la tarde antes de regresar, cansados, con la piel calentada por el sol y el aroma del café de fogata.
El tour suele durar entre 8 y 9 horas, incluyendo traslados desde Moshi o Arusha.
¡Sí! Puedes nadar en ambos lugares, solo recuerda traer traje de baño y toalla.
El almuerzo se sirve en el pueblo Materuni e incluye bebidas como refrescos o cerveza local.
La caminata a las cataratas es moderada y accesible para la mayoría; solo usa calzado cómodo.
Tu viaje incluye todos los traslados en vehículo con aire acondicionado, entradas a las cataratas Materuni y aguas termales Kikuletwa, tour guiado de café, almuerzo con bebidas (cerveza Kilimanjaro o refrescos), y tiempo para nadar y relajarte en cada parada.
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