Te recogerán directamente en el aeropuerto de Kiruna o en el lobby de tu hotel con un conductor local que habla inglés y sueco, sin multitudes ni confusiones. Disfruta de un coche privado durante el trayecto de 1.5 horas entre paisajes nevados de Laponia hasta Abisko o Bjorkliden. En el camino, tal vez escuches historias locales o tengas suerte y veas renos salvajes. Hay algo especial y tranquilo en llegar así.
¿Alguna vez te has preguntado qué tan silencioso puede volverse el mundo al salir del aeropuerto de Kiruna y ver a un desconocido sosteniendo un cartel con tu nombre? Así empezó mi viaje por Laponia sueca: solo yo, mi maleta y un conductor llamado Johan que me estrechó la mano como si nos conociéramos de toda la vida. El aire estaba tan frío que picaba, pero olía limpio, casi a metal. Subimos a su furgoneta (asientos calefactados, gracias a Dios) y traté de no quedarme embobado mirando el cielo rosa pálido afuera.
El trayecto de Kiruna a Abisko dura unas 1.5 horas, pero la verdad se me hizo más corto. Quizá fue por las historias de Johan sobre su infancia en el norte: me señaló dónde a veces se cruzan alces en la carretera (hoy no vimos ninguno, pero bajó la velocidad por si acaso). Cambiaba entre inglés y sueco cuando hablaba con su esposa, algo que me sacó una sonrisa. No paraba de pensar que debería haber traído guantes más abrigados. La clave aquí es traslado privado Kiruna Abisko: nada de esperar buses ni andar con horarios, solo un viaje tranquilo entre nieve y silencio.
No esperaba que el paisaje cambiara tan rápido: un momento árboles de abedul congelados, y al siguiente, una extensa llanura blanca con montañas lejanas en el horizonte. Pasamos también por Bjorkliden; Johan señaló un grupo de cabañas y mencionó algo sobre los mejores waffles de la zona (todavía me arrepiento de no pedirle que parara). Cuando finalmente llegamos a mi hotel en Abisko, me ayudó con la maleta y me dijo “Lycka till”—buena suerte. Fue algo más personal de lo que esperaba para un simple traslado. No sé por qué eso me quedó grabado.
El viaje dura alrededor de 1.5 horas entre Kiruna y Abisko.
Sí, la recogida está incluida tanto en el aeropuerto de Kiruna como en el lobby de tu hotel en ambas direcciones.
Se pueden solicitar asientos especiales para bebés y niños pequeños.
Sí, los animales de servicio están permitidos durante el traslado privado.
Tu conductor habla tanto inglés como sueco para facilitar la comunicación.
Sí, es apto para todos ya que es un transporte privado puerta a puerta.
Tu viaje incluye transporte privado en un vehículo con aire acondicionado y conductor que habla inglés y sueco; recogida en aeropuerto de Kiruna o lobby del hotel; asientos especiales para bebés disponibles bajo petición; animales de servicio bienvenidos; la entrega cubre todas las propiedades en las zonas de Abisko y Bjorkliden.
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