Te recogen en cualquier punto de Sint Maarten con un conductor local que conoce todos los atajos y secretos. Disfruta de agua fría, WiFi que funciona y un viaje cómodo directo a tu puerta — ya sea en Philipsburg o Marigot. Es el confort sencillo y la calidez isleña que recordarás mucho después de aterrizar.
Él ya me estaba saludando desde la acera antes de que yo siquiera viera la van — sonrisa amplia, un cartel con mi nombre, y la verdad, ese primer aire acondicionado fue un pequeño milagro después del calor pegajoso en el aeropuerto Juliana. La van olía un poco a protector solar de coco y a algo floral que no supe identificar. Nuestro conductor, Jean-Paul, preguntó si queríamos música o silencio (dije música, pero bajito — él asintió como si eso le pasara mucho). Había agua fría en el portavasos y toallas dobladas en el asiento trasero. Es curioso cómo esos detalles pequeños importan cuando vienes cansado de un vuelo.
Navegamos por el tráfico de Philipsburg mientras Jean-Paul señalaba dónde atracan los cruceros (“los miércoles se pone loco,” nos advirtió) y qué bares de playa habían reabierto esta temporada. Nos contó que su familia vive en ambos lados de la isla — holandés y francés — y que aquí la gente cambia de idioma en mitad de la frase sin darse cuenta. Intenté decir “gracias” en holandés; él se rió suave y me corrigió (seguro que lo dije mal igual). El WiFi funcionaba de verdad, así que le mandé a mi mamá una foto por mensaje: agua turquesa, techos quemados por el sol y un hombre vendiendo mangos bajo una sombrilla.
No esperaba sentirme tan relajado solo por ir de un punto a otro. Quizá fue saber que alguien local tenía todo bajo control — o simplemente no tener que discutir con taxistas por una vez. Nos dejaron justo en la puerta de nuestra guesthouse en Marigot, sin complicaciones. Si quieres conocer más de Sint Maarten sin estrés (o si llevas maletas, niños o prefieres evitar el bus), este servicio privado vale totalmente la pena. Todavía recuerdo ese primer sorbo de agua fresca al salir de llegadas — qué tontería lo que se queda en la memoria.
Sí, el transporte privado en Sint Maarten funciona todo el día, todos los días.
Sí, la recogida se hace en el sitio que elijas en la isla.
Sí, el WiFi está disponible a bordo durante tu traslado privado.
Sí, hay asientos especiales para bebés y espacio para cochecitos.
Sí, todos los vehículos y zonas son accesibles para sillas de ruedas.
Sí, los animales de servicio están permitidos durante el traslado.
Tu traslado incluye transporte privado por toda Sint Maarten con recogida donde necesites, WiFi a bordo para que estés conectado, además de una botella de agua fresca y toallas listas para ti al subir.
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