Montarás camellos por dunas doradas cerca de Doha, probarás el quad en la arena abierta y vivirás la emoción del dune bashing con un guía local que conoce todos los atajos. Refresca tu día en el mar interior de Khor al Udaid antes de volver a la ciudad, con el sabor del café con cardamomo aún en el paladar.
Aún recuerdo cómo se me llenaron los zapatos de arena fina antes de subirme al camello. Acabábamos de dejar atrás Doha—la bruma de la ciudad en el retrovisor—y de repente todo era oro y silencio. Nuestro guía, Khalid, me ofreció un café con cardamomo de un termo (se me derramó un poco; nervios, supongo). El paseo en camello fue más lento de lo que esperaba, casi meditativo, salvo por un camello que no paraba de bufar a su vecino. El aire olía seco, pero no áspero, más bien como piedra tibia después de la lluvia.
Luego llegaron los quads. Nunca había conducido uno—mi pareja se rió cuando lo paré al principio—pero tras unos cuantos intentos le fui tomando la mano. Las dunas parecían infinitas desde el suelo. Hay una mezcla extraña entre libertad y pequeñez total allá afuera. Khalid nos hizo señas para que paráramos a beber y nos mostró huellas en la arena—dijo que podrían ser de zorros o perros salvajes. Difícil saberlo, se encogió de hombros.
La palabra clave aquí es safari en el desierto de Doha, pero lo que más me quedó grabado fue el momento en que paramos para desinflar las ruedas antes del dune bashing (nunca pensé que eso existiera). El conductor subió música pop árabe y todos nos agarramos fuerte mientras zigzagueaba por pendientes que desde dentro del coche parecían mucho más empinadas. El corazón me latía a mil, pero todos acabamos riendo cuando nos dimos cuenta de que nadie gritaba—solo risas nerviosas por doquier.
Después de tanta adrenalina, Khor al Udaid parecía de otro mundo: mar y arena bajo un cielo inmenso, sin un edificio a la vista. Algunos se metieron a nadar; yo me quedé sentado junto al agua viendo pequeños cangrejos correr de lado. Es curioso lo silencioso que se pone todo allí—salvo por el viento o alguna voz en árabe de vez en cuando. De regreso a MIA Park, con la piel quemada y la arena pegada, no dejaba de pensar en lo distinto que se sentía todo comparado con ese primer paso en el desierto.
Sí, la recogida desde tu alojamiento o un punto central en Doha está incluida.
El tour incluye paseo en camello, conducción de quad ATV, dune bashing, sandboarding y tiempo en la playa de Khor al Udaid.
La experiencia completa dura varias horas, incluyendo el traslado desde Doha al desierto y de regreso.
No se menciona almuerzo; sí se proporciona agua embotellada y café o té.
Sí, es para todos los niveles físicos, incluso si nunca has montado un quad o camello.
Sí, hay tiempo libre para relajarte o nadar en la playa de Khor al Udaid durante el tour.
Los guías hablan inglés y explican cada actividad durante el recorrido.
Sí, hay una parada para usar el baño antes de empezar el dune bashing en el desierto.
Tu día incluye recogida en hotel o punto de encuentro en Doha, todas las actividades como paseo en camello y quad con guías locales, agua embotellada y café o té durante el recorrido, y transporte con aire acondicionado de regreso tras el tiempo en el mar interior.
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