Recorre las callejuelas de Haarlem solo con tu móvil y curiosidad, resolviendo acertijos sobre Pieter Teyler. Disfruta paradas sorpresa en museos y hofjes, y tómate tu tiempo para un café o un dulce cuando quieras. Un paseo autoguiado a tu ritmo, con risas por las respuestas erróneas y recuerdos que quedarán mucho después de la última pista.
Saliendo de la estación de Haarlem, aún desperezándonos del viaje en tren, abrimos la app Discovery Trip — sin guía ni banderas, solo nosotros y la ciudad. La primera pista apareció antes de que pudiéramos ubicar el norte. Se olía café en el aire (seguro de alguna de esas cafeterías escondidas junto al canal), y mi amiga no paraba de señalar los ladrillos antiguos como si estuviéramos en un programa de arquitectura. Teníamos que encontrar el retrato perdido de Pieter Teyler, pero la verdad, yo estaba más pendiente de no tropezar mientras leía las pistas.
Los acertijos empezaron fáciles — quizás demasiado — pero se complicaron cerca del hofje. Hubo un momento frente al Museo Teylers en que intentábamos adivinar qué detalle era clave para la siguiente respuesta. Pasó una vecina con su bici y nos sonrió con complicidad (seguro que ha visto muchas caras perdidas por aquí). La frase “paseo autoguiado Haarlem” no dejaba de rondarme la cabeza porque realmente íbamos a nuestro ritmo; nos paramos a mitad de camino para disfrutar unos stroopwafels, sin prisas.
Cerca de la antigua Waag, me di cuenta de la historia que guardan estas calles — casi puedes sentirla en las piedras irregulares bajo tus pies. Las campanas de la iglesia resonaban en Grote Markt justo cuando resolvíamos otro acertijo (mi amiga hizo una pequeña danza de victoria; nadie nos miró raro, lo cual se agradece). Al llegar al Museo Frans Hals para otro desafío, ya estaba compitiendo en serio por nuestra puntuación. No es que importe mucho, pero aún así…
Todo el día en Haarlem fue como meterse en la historia de otro — la de Pieter Teyler, supongo — pero también hacerla nuestra. Terminamos en Grote Markt con los dedos pegajosos de los pasteles y un montón de fotos que seguro nadie más entenderá. Todavía recuerdo aquella pista junto a la Vleeshal; nunca supimos si la resolvimos bien o simplemente adivinamos lo suficiente para seguir.
El Discovery Trip dura unos 90 minutos pero puedes pausarlo cuando quieras.
No, no hay horarios fijos; comienzas cuando te venga mejor.
No, no necesitas entrada a museos para resolver los acertijos.
La ruta comienza en la estación de tren de Haarlem.
Sí, bebés y niños pequeños pueden unirse; se permiten cochecitos.
Sí, puedes llevar animales de servicio durante el paseo.
Sí, hay opciones de transporte público cerca del punto de inicio.
Solo tu móvil con la app Discovery Trips descargada.
Tu experiencia incluye acceso completo al Discovery Trip “El retrato perdido de Pieter Teyler” a través de su app—descárgala antes de salir—y todo lo necesario para resolver los acertijos a tu ritmo por Haarlem.
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