Sube directo a los Jardines de Keukenhof desde un shuttle cómodo que sale de Amsterdam—entrada incluida—y pasea entre millones de tulipanes a tu ritmo. Puedes regresar en cualquier bus; quédate todo el tiempo que quieras. Desde el café al salir hasta el aire perfumado de pétalos, es un día relajado lleno de color y pequeñas sorpresas.
“Esta flor querrás olerla,” sonrió nuestro conductor mientras bajábamos del bus en Keukenhof, aún con el café en mano que habíamos tomado en la sala de espera en Amsterdam. Nunca había visto a tanta gente sonreír por unas flores: familias con cochecitos, parejas de la mano, incluso un grupo de estudiantes practicando su holandés leyendo el mapa en voz alta. El aire estaba húmedo pero no frío, con una mezcla dulce de jacintos y hierba que se me quedó pegada a la chaqueta por horas.
El shuttle de This is Holland fue más fácil de lo que esperaba: un ferry rápido detrás de la Estación Central (gratis, lo que ya fue una pequeña victoria), y luego una caminata corta pasando ese edificio redondo con la bandera. Salimos cuando quisimos, porque los buses pasan cada media hora. Nadie nos apuró. Nuestro guía local nos señaló los mejores momentos para ver ciertos campos de tulipanes (“después de comer, cuando la luz es perfecta”), pero la mayoría del tiempo paseamos a nuestro aire. A veces perdía a mis amigos entre la gente y me quedaba mirando a los niños intentando pronunciar “Keukenhof”.
No podía dejar de pensar en la cantidad de bulbos que plantan aquí—¿siete millones? Es difícil imaginarlo hasta que caminas entre ellos. Hubo momentos de silencio donde se escuchaba el agua correr cerca o risas en otro idioma. Los caminos son accesibles para todos (vi sillas de ruedas y cochecitos por todas partes), y si te da hambre hay comida, aunque yo solo picoteé stroopwafels que llevaba en la mochila. En algún momento perdí totalmente el sentido de la orientación, pero no me importó nada—no hay camino equivocado en este lugar.
Nos quedamos más tiempo del planeado porque nadie quería irse, y estuvo bien porque los buses de regreso funcionan hasta las 6:30 PM. Al atardecer la luz se volvió más suave y todo parecía irreal, como si pudieras saborear la primavera en el aire. En el viaje de vuelta encontré pétalos en el bolsillo y pensé en lo simple que fue todo: solo flores, aire fresco y no tener que preocuparme por el parking o los horarios del tren por una vez.
Tomas un ferry gratis desde el andén F3 detrás de la Estación Central hacia Buiksloterweg. Al bajar, caminas 3 minutos hasta “This is Holland,” donde sale el shuttle.
Sí, tu ticket incluye transporte ida y vuelta en shuttle y entrada rápida a los Jardines de Keukenhof.
Los buses salen cada 30 minutos durante todo el día desde Amsterdam hacia Keukenhof.
Sí, puedes tomar cualquier bus de regreso; el último sale de Keukenhof a las 6:30 PM.
El shuttle sale desde “This is Holland,” cerca de Overhoeksplein, justo enfrente de la Estación Central vía ferry.
Sí, “This is Holland” tiene baños gratis, una sala de espera agradable y buen café antes de subir al bus.
Sí, los caminos son accesibles para sillas de ruedas y cochecitos; los bebés pueden ir en brazos o en asientos especiales.
El trayecto dura unos 40 minutos en un bus con aire acondicionado.
Tu día incluye entrada rápida a los Jardines de Keukenhof y transporte ida y vuelta en un shuttle cómodo desde el centro de Amsterdam. Comienzas en “This is Holland” con acceso a baños y café antes de subir; las salidas flexibles te permiten quedarte todo el tiempo que quieras y regresar en cualquier bus disponible, sin preocuparte por el parking o el transporte público.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?