Sube a un helicóptero para sobrevolar los glaciares Franz Josef y Fox, guiado por un piloto local que comparte historias mientras vuelas sobre estos campos de hielo milenarios. Aterriza en lo alto del glaciar para caminar sobre nieve pura, sentir el aire glacial en tu rostro y disfrutar de vistas que recordarás mucho después de dejar la Isla Sur de Nueva Zelanda.
“¿Listos para esto?” nos sonrió el piloto, mientras el casco de comunicación crepitaba y las hélices empezaban a girar más rápido. Recuerdo apretar la mano de mi pareja — no por miedo, sino por esa mezcla extraña de nervios y emoción que sientes justo antes de algo grande. El pueblo de Franz Josef parecía diminuto al despegar, y en segundos todo lo que veías era la selva verde cediendo paso al blanco, con los glaciares extendiéndose como ríos congelados bajo nosotros. Hacía más frío de lo que esperaba allá arriba; podía oler ese toque metálico de la nieve que entraba por las ventilaciones.
Nuestro guía, Mike (que creció en Hokitika y nos contó cómo fue la primera vez que vio el hielo de niño), señalaba grietas y vetas azules en el glaciar Franz Josef. No paraba de decir “¡mira a la izquierda!” o “¡ahora a la derecha!” tan rápido que casi me pierdo la mitad. Al volar sobre Fox Glacier, me llamó la atención lo áspera y viva que parecía la nieve desde arriba — nada lisa, más bien como si un gigante hubiera pasado los dedos por crema batida. Intenté sacar fotos, pero la mayoría salieron borrosas porque me temblaban las manos. Así que sí, lleva guantes.
Cuando aterrizamos en el glaciar — ese crujido bajo los pies, impresionante. Es más silencioso de lo que imaginas; solo el viento y el roce de nuestras botas sobre la nieve compacta. Tiramos unas bolas de nieve torpes (no soy muy bueno en eso) y nos hicimos las típicas fotos de turista, pero luego hubo un momento de silencio donde nadie dijo nada. Solo disfrutando el instante. Mike nos contó cuánto ha retrocedido el glaciar desde que era niño — se notaba un peso en su voz al decirlo. Eso me quedó grabado más que cualquier foto.
El vuelo completo dura unos 35 minutos, incluyendo el aterrizaje en la nieve.
Sí, el aterrizaje en nieve está garantizado en la cima de Franz Josef o Fox Glacier.
Sí, el piloto ofrece comentarios en vivo e informativos durante todo el vuelo.
Sí, los niños son bienvenidos pero deben ir acompañados por un adulto; los bebés menores de 15 kg se sientan en el regazo de un adulto.
Se recomienda ropa cálida y calzado adecuado por las bajas temperaturas en el glaciar.
No se menciona recogida en hotel; los pasajeros deben presentarse en el punto de partida en el pueblo de Franz Josef.
Sí, esta experiencia en helicóptero es accesible para personas en silla de ruedas.
Sí, sobrevolarás ambos glaciares durante esta experiencia en helicóptero.
Tu día incluye un vuelo panorámico de 30 minutos en helicóptero sobre los glaciares Franz Josef y Fox con comentarios en vivo de tu piloto local; además de un aterrizaje garantizado en la cima de uno de estos antiguos campos de hielo para que camines sobre nieve glacial antes de regresar juntos a la base.
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