Comienza tu día antes que la mayoría de viajeros en Nara: pasea por templos tranquilos, alimenta ciervos que se inclinan en el Parque de Nara y contempla los antiguos faroles del Santuario Kasuga con solo el sonido de tus pasos. Con un guía local y el tren desde Kioto u Osaka incluidos, descubrirás una Nara que pocos ven y que recordarás más que cualquier foto.
Nunca imaginé estar tan despierto al amanecer, pero bajar del tren en Nara con el aire fresco y un poco húmedo fue otra cosa. Nuestra guía, Yuki, con esa manera tan dulce de explicar, nos hizo señas como si fuéramos viejos amigos. Las calles estaban casi vacías, solo algunos locales en bici y dueños de tiendas medio dormidos levantando las persianas. Empezamos en el templo Kofuku-ji, donde la pagoda de cinco pisos se veía misteriosa con la luz suave de la mañana. Intenté sacar una foto, pero la verdad no le hizo justicia. A veces solo hay que quedarse quieto y dejar que la memoria guarde ese momento.
Cuando llegamos al Parque de Nara, los famosos ciervos ya andaban sueltos, olisqueando a la gente en busca de snacks. Alimentarlos es divertido, porque en realidad se inclinan (o quizás son expertos en sacar galletas a los turistas). Uno me mordisqueó la manga y Yuki se rió, diciendo que es buena suerte si te eligen a ti. Todavía tenía migas en las manos cuando nos dirigimos al templo Todai-ji. Cruzar esa enorme puerta de madera fue como entrar a otro mundo; dentro, el Gran Buda está tan tranquilo que todos hablan en susurros sin darse cuenta. Había un olor suave a incienso mezclado con madera vieja, difícil de describir pero muy relajante.
Mi parte favorita fue el Gran Santuario Kasuga, aunque no lo esperaba. Miles de faroles de piedra bordeaban el camino bajo altos cedros, con musgo cubriendo cada superficie. Pasó una mujer local y nos saludó con una sonrisa; llevaba una campanilla atada a su bolso que sonaba suavemente al alejarse. Todo se sentía en paz de una forma que no sé explicar; tal vez porque aún no había turistas o simplemente porque las mañanas en Nara son especiales, diferentes a cualquier otro lugar que haya visitado.
El tour dura 4.5 horas si sales desde las estaciones de Kioto u Osaka, o 3.5 horas si te encuentras en la estación Kintetsu Nara.
El billete de tren desde Kioto u Osaka a Nara está incluido si eliges esa opción; el regreso no está incluido.
Caminarás alrededor de 10,000 pasos, incluyendo escaleras y cuestas durante el recorrido.
Visitarás el templo Kofuku-ji, el templo Todai-ji con el Gran Buda, el Gran Santuario Kasuga y pasearás por el Parque de Nara.
Niños menores de 6 años no pueden participar en este tour.
No hay recogida en hotel; los puntos de encuentro son en las estaciones de Kioto, Osaka o Kintetsu Nara según tu reserva.
El precio incluye un guía en inglés y el billete de tren de ida desde Kioto u Osaka a Nara si lo seleccionas.
Tu día incluye un guía en inglés que te espera en la estación de Kioto u Osaka (si eliges esa opción), cubre tu billete de tren a Nara para un inicio sin complicaciones, y te lleva por los principales sitios: templo Kofuku-ji, el Gran Salón del Buda en Todai-ji, los senderos de faroles del Gran Santuario Kasuga y tiempo con los ciervos en el Parque de Nara antes de que regreses a tu ritmo.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?