Tendrás un yate privado para ti durante todo un día en las Islas Vírgenes—snorkel con tortugas en Maho Bay, relax en Honeymoon Beach y navegación frente a Trunk Bay. Todo se trata de una aventura tranquila y buena compañía, con todo cuidado por tu tripulación.
Lo primero que noté al subir a la cubierta fue el suave vaivén—nada exagerado, justo lo suficiente para recordarte que ya no estás en tierra firme. El capitán nos recibió con una sonrisa y un breve resumen del plan del día, pero, sinceramente, se sentía más como charlar con un viejo amigo que como un informe formal. Partimos alrededor de las 10 de la mañana, con el sol calentando ya la cubierta de teca bajo nuestros pies, y la brisa salada me hizo olvidar el móvil casi al instante.
Maho Bay fue nuestra primera parada. El agua aquí es tan cristalina que puedes ver a las tortugas deslizarse antes incluso de ponerte la máscara. Nuestro guía nos dio algunos consejos para el snorkel (cuidado con los parches de pasto marino—ahí es donde suelen estar las tortugas), y en pocos minutos ya flotábamos sobre dos de ellas mientras mordisqueaban. Si escuchas bajo el agua, se oye un leve crujido de peces loro masticando coral—algo que nunca había notado antes.
De vuelta a bordo, navegamos hacia Honeymoon Beach. La tripulación ya estaba preparando el almuerzo—wraps de pollo a la parrilla y fruta fresca, nada sofisticado pero perfecto después de nadar. Me recosté en un puff con una bebida fría mientras alguien ponía a Bob Marley bajito desde su móvil. La arena aquí es suave y apenas calienta, incluso al mediodía; al parecer, es por la forma en que la bahía se curva y la sombra que proyectan las palmeras.
Más tarde, navegamos frente a Trunk Bay—esas vistas de postal son reales, pero verlas desde el agua tiene otro encanto. Si te apetece, hay otra oportunidad para hacer snorkel o simplemente flotar con una bebida en la mano. De regreso, uno de los tripulantes señaló pequeñas islas que ni siquiera tienen nombre en Google Maps. A las 4 de la tarde, estábamos dorados por el sol y con el cabello salado, no queríamos irnos todavía, pero felices de haber exprimido cada instante del día.
¡Claro! Los bebés y niños pequeños son bienvenidos—puedes traer cochecito o carrito para mayor comodidad a bordo.
Por supuesto—todo el equipo de snorkel está incluido para todos a bordo.
La tripulación hará todo lo posible para que todos se sientan cómodos, pero los viajeros deben poder moverse con seguridad en la cubierta y entrar/salir del agua.
Sí—el almuerzo, snacks, agua embotellada, refrescos y bebidas alcohólicas forman parte de la experiencia de alquiler.
Por supuesto—el capitán hablará contigo para saber qué quieres ver o hacer, y así adaptar el día a tu grupo perfectamente.
Tu alquiler de día completo incluye almuerzo (piensa en wraps y fruta fresca), snacks durante todo el viaje, todas las bebidas (refrescos y cócteles), agua embotellada, uso de equipo de snorkel de primera calidad—y una tripulación amable que se encarga de todo para que solo te relajes.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?