Entra en Shepton Mallet Prison para el reto The Cell escape room, compitiendo contra 60 minutos mientras buscas pistas en una celda real. Con la entrada incluida para una visita autoguiada antes o después del juego, vivirás adrenalina e historia en una sola experiencia — y seguro que también alguna que otra risa si tus amigos se ponen nerviosos.
Pasamos por las pesadas puertas de Shepton Mallet Prison, esas que se cierran con un portazo que se siente en el pecho. Nuestro guía — Dave, un exguardia de prisión, según dijo — nos entregó al “maestro de juegos” con una media sonrisa, como si ya supiera que la íbamos a liar. Señaló nuestra celda y dijo: “Tienen una hora. No pierdan la llave.” Me reí, pero la verdad es que las palmas ya me sudaban. Hay algo en estar encerrado en una celda de verdad que te cala — piedra fría, el eco de pasos por el pasillo, aunque sea solo un juego.
The Cell escape room no es solo resolver acertijos pegados en la pared; tienes que buscar pistas en sitios donde los presos realmente escondían cosas. En un momento estaba agachado junto a un viejo marco de cama oxidado, intentando descifrar unos números rayados en el metal, mientras mi amigo trataba (y fallaba) de entender un poco de jerga cockney en una pista de audio. Discutíamos sobre qué cerradura probar primero — siempre hay alguien que se cree un genio hasta que un candado lo deja en blanco. El maestro de juegos nos habló por el intercomunicador un par de veces, burlándose de que estábamos “a mitad de camino hacia la libertad.” Fue tenso, pero también divertido.
Cuando finalmente escapamos (con seis minutos de sobra — no es por presumir), recorrimos el resto de Shepton Mallet Prison por nuestra cuenta. Puedes hacer la visita guiada por libre antes o después; nosotros elegimos después porque necesitábamos recuperar el aliento y reírnos de lo mal que habíamos trabajado en equipo. Caminando por esos pasillos vacíos, leyendo viejos grafitis en las paredes de las celdas, me di cuenta de toda la historia que guarda este lugar — algunas celdas aún olían a humedad y metal, como si el tiempo no se hubiera ido del todo. No esperaba sentir nada más que alivio tras salir de The Cell, pero hay algo en estar en esos corredores que se queda contigo.
El desafío principal dura 60 minutos.
Sí, tu entrada incluye la visita autoguiada por la prisión histórica.
Sí, se permiten animales de servicio en Shepton Mallet Prison.
Sí, hay opciones de transporte público cerca de la prisión.
La experiencia es apta para todos los niveles físicos.
Un maestro de juegos dedicado supervisa tu sesión y ayuda si es necesario.
Tu entrada cubre todas las tasas y cargos, acceso completo a The Cell escape room con apoyo de un maestro de juegos durante todo el reto, además de la entrada para recorrer por libre los históricos pasillos de Shepton Mallet Prison antes o después del juego.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?