Bajas del avión en Roatán y ves tu nombre esperándote en la acera—sin dudas ni estrés. Un conductor local te lleva directo a tu hotel o alquiler (con opción a parada en supermercado si quieres). En el camino, tendrás pequeñas pinceladas de la vida isleña y quizás aprendas alguna palabra nueva—momentos simples que hacen que la llegada se sienta más real y menos logística.
“¿Ese es mi nombre?” solté un poco más alto de lo que quería cuando vi el cartel escrito a mano justo después de migración en el Aeropuerto Internacional de Roatán. Mi conductor — Mario, creo que se llamaba — sonrió y me hizo señas para que me acercara. El aire afuera estaba denso y salado, mucho más cálido que el aire acondicionado en la zona de equipaje, pero la verdad es que se sentía bien después del vuelo. Mario me ayudó con la maleta (que pesaba más de lo que quería admitir) y luego nos dirigimos a su van que estaba justo en la acera. Nada de andar perdido o regateando, lo cual fue un alivio.
Mientras manejábamos por Coxen Hole, Mario me señalaba lugares — “Ahí es donde los locales compran baleadas,” me dijo tocando el volante. Intenté repetirlo (“ba-leh-ah-das?”), lo que le sacó una carcajada. La van estaba impecable y fresca por dentro, pero cada vez que parábamos en un semáforo se colaba el aroma del mar. Me preguntó si quería pasar por un supermercado antes de llegar a mi alquiler; parece que es algo común aquí, sobre todo si te quedas fuera de West End. Sentí que alguien había pensado en todas esas pequeñas cosas que suelen complicarme la llegada.
El trayecto desde el aeropuerto hasta Sandy Bay duró unos 25 minutos, pero se sintió más lento de una manera agradable — tal vez porque nadie tenía prisa ni tocaba la bocina (salvo un tipo en scooter que parecía conocer a Mario). Pasamos por casas coloridas escondidas entre palmeras y niños saludando desde los porches. Cuando llegamos a mi alojamiento, Mario revisó la dirección conmigo antes de bajar mi maleta. Había algo en lo fácil que fue todo que se quedó conmigo — nada lujoso, simplemente… sencillo.
Sí, el servicio privado incluye recogida en la acera para cualquier vuelo nacional o internacional que llegue al Aeropuerto Internacional de Roatán.
Sí, puedes solicitar a tu conductor con anticipación una parada en supermercado o farmacia antes del check-in en tu hotel o alquiler.
Sí, ofrecemos traslados hacia y desde los dos principales terminales de ferry de la isla.
Tu conductor te esperará con un cartel con tu nombre en el área designada justo afuera de migración y reclamo de equipaje.
Sí, hay opciones desde vans de 10–15 asientos, buses de 20–28, SUVs y sedanes para parejas o grupos pequeños.
Sí, todas las áreas y vehículos son accesibles para sillas de ruedas y se permiten animales de servicio.
Tu traslado incluye vehículo privado con aire acondicionado desde el aeropuerto o terminal de ferry en Roatán (con cartel con tu nombre), traslado directo a tu hotel o alquiler en cualquier punto de la isla, y una parada opcional en supermercado o farmacia si la pides con anticipación.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?