Seguirás los pasos de los antiguos mayas en las Cuevas de Candelaria, flotarás en un río subterráneo en tubo y nadarás en piscinas naturales bajo techos de piedra. Ríe, disfruta momentos de calma y siente el misterio que te acompaña mucho después de irte.
No sabía qué esperar cuando salimos de Cobán esa mañana, solo una emoción vaga y la promesa de cuevas que significaron mucho para los mayas. El viaje hacia el norte duró más de lo que pensaba (unas dos horas, pero se pasó rápido), con colinas verdes que se sucedían y nuestro guía, Carlos, señalando pueblos y contando historias sobre el pueblo Q’eqchi’. Al llegar me dio un casco—“para proteger tu cabeza, no tu estilo,” bromeó—y entendí que esto no sería solo una caminata en la oscuridad.
El aire cambió en cuanto entramos a las Cuevas de Candelaria. Olía a humedad y antigüedad, como piedra mojada y tierra tras la lluvia. Mis zapatos resbalaron un poco sobre las rocas lisas, pero Carlos se movía con soltura, su linterna iluminando grabados en las paredes. Me contó que estas cuevas fueron una puerta al inframundo para los mayas; intenté imaginar ceremonias resonando en ese silencio fresco. Había pedazos de cerámica escondidos en rincones—restos de siglos atrás. Se sentía extraño y cercano, como si hubiéramos entrado en un cuarto secreto.
Después nos metimos en una piscina bajo un techo bajo de roca—el agua estaba tan fría que me hizo jadear. Luego vino el tubing por el río subterráneo, que fue a la vez tranquilo y divertido (en un momento di vueltas y Carlos se rió). La luz que entraba por grietas hacía que todo se viera azul verdoso. No paraba de pensar en cuánta gente había pasado por aquí antes que nosotros, cada uno con sus motivos. De regreso a Cobán estaba cansado, pero no podía dejar de repetir en mi mente esos ecos—ya sabes, cuando algo se queda contigo más de lo esperado.
Se tarda unas 2 horas en transporte privado desde Cobán hasta las cuevas.
Sí, incluye recogida en hoteles de Cobán y alrededores.
El tour incluye caminata dentro de las cuevas, nado en piscinas naturales y tubing por un río subterráneo.
Sí, incluyen cascos, linternas y las entradas a las cuevas.
No se menciona almuerzo; lleva snacks o pregunta a tu guía por opciones locales.
Un guía local te acompaña todo el tiempo para compartir historias y cuidar la seguridad.
No se recomienda para embarazadas ni personas con problemas de columna o cardiovasculares; se requiere condición física moderada.
Lleva traje de baño, toalla, zapatos para agua si puedes y ropa seca para después del tubing.
Tu día incluye transporte privado con recogida en hotel en Cobán o alrededores, entradas a las Cuevas de Candelaria, uso de cascos y linternas para explorar seguro, equipo para tubing en el río subterráneo y la guía de un experto local que conoce cada historia detrás de estas piedras, para luego regresar cómodo al atardecer.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?