Si quieres comprar como un local en Italia, probar auténticos dulces de limón en Menton y disfrutar de vistas increíbles desde La Turbie, todo sin preocuparte por el transporte, esta excursión de día completo es para ti.
Empezamos temprano, con el aire fresco mientras nuestro conductor nos recogía justo frente al hotel en Niza. Cruzar a Italia se sentía casi mágico: un momento escuchas francés y al siguiente, “ciao” y “buongiorno” por todas partes. El mercado de San Remo ya estaba lleno de vida cuando llegamos. Bolsos de cuero colgaban por todos lados, y no pude evitar acariciar algunos—suaves, auténticos, con ese aroma sutil a piel curtida mezclado con el olor a pan recién hecho de un puesto cercano. Nuestro guía nos señaló un pequeño café escondido detrás de la plaza principal donde los locales toman su espresso matutino; entré rápido a probar uno mientras veía a los vendedores montar sus puestos de zapatos y bufandas.
Después de comprar algunos regalos (y quizás una cartera nueva), volvimos a cruzar la frontera hacia Menton. La ciudad se siente más tranquila aquí—edificios en tonos pastel, limoneros cargados de fruta y esa brisa salada suave que viene del mar. Paseamos por el paseo marítimo un rato; notarás lo silencioso que se pone lejos de la calle principal, solo gaviotas volando y locales charlando en mesas al aire libre. Nuestro guía contó historias sobre el festival del limón de Menton y nos señaló una panadería famosa por su tarta de limón—no pude resistirme a comprar una para compartir.
La última parada fue La Turbie, en lo alto sobre Mónaco. La carretera serpentea entre pinos y de repente estás mirando techos y yates allá abajo. Allí está el antiguo monumento romano—el Trofeo de Augusto—justo al borde del pueblo. Saqué una foto mientras nuestro guía nos contaba su historia; al parecer, es uno de los últimos vestigios romanos en esta zona de Francia. La vista es impresionante—en un día despejado se puede ver hasta Italia.
Sí, como cruzamos a Italia para el mercado de San Remo, lleva tu pasaporte o DNI.
¡Claro! Tendrás tiempo suficiente para recorrer los puestos o tomar un espresso.
Sí, solo avísanos al reservar para preparar asientos especiales para los más pequeños.
Se requiere caminar con comodidad por mercados y calles de los pueblos, con un ritmo moderado.
Este tour incluye recogida y regreso al hotel en Niza, transporte en furgoneta con aire acondicionado y combustible incluido, comentarios en vivo de tu conductor-guía durante todo el día, y mucho tiempo libre en cada parada para que explores o compres a tu ritmo.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?