Flota sobre Temecula al amanecer en un globo compartido, guiado por un piloto local que comparte historias y consejos mientras recorres los viñedos. Disfruta mimosas en el vuelo y vistas únicas que se quedan contigo mucho después de aterrizar.
Cuando ya estábamos dentro de la cesta, ya se percibía ese dulce aroma de las vides mezclado con el aire fresco antes del amanecer. Nuestro piloto, Mike —que lleva toda la vida en Temecula— soltó un chiste sobre los “madrugadores” y nos señaló cómo la luz empieza a deslizarse por las colinas sin que te des cuenta. Yo aún medio dormido, y de repente estábamos flotando, así, sin más, sobre filas y filas de viñedos. El silencio allá arriba es sorprendentemente suave, salvo por el ocasional sonido del quemador. No da miedo, es más bien una sensación de paz y algo irreal.
Intenté sacar una foto, pero la verdad nada logra captar lo que se siente al mirar desde arriba esas pequeñas bodegas y ver la niebla enroscándose entre ellas. Mike no paraba de señalar lugares —“Ahí abajo está Wilson Creek” o “¿Ves esa zona? Ahí hacen conciertos en verano.” Nos dio agua embotellada (casi se me cae) y luego nos sirvió mimosas cuando nos estabilizamos en el aire. El jugo de naranja sabía más intenso con el frío, o quizá era la emoción de flotar sobre la región vinícola. Alguien preguntó por lugares para comer después y él nos recomendó sus favoritos —resulta que conoce todos los camiones de tacos del pueblo.
No esperaba sentir tanta calma allá arriba. Hay un momento en que todos se quedan en silencio, simplemente viendo cómo el sol atraviesa la niebla sobre el valle de Temecula. Es curioso, pensé que estaría nervioso, pero en cambio me sentí afortunado de verlo desde el aire con desconocidos que se volvieron como amigos por una hora. El aterrizaje fue suave (Mike nos explicó bien qué hacer), y de pronto estábamos de nuevo en tierra firme, parpadeando bajo la luz de la mañana. Cada vez que huelo naranjas, me acuerdo de esa vista.
El vuelo suele durar alrededor de una hora, según las condiciones del clima.
Sí, el transporte privado está incluido con la reserva.
Incluye agua embotellada y mimosas durante el vuelo.
Sí, los animales de servicio están permitidos en esta experiencia.
No, no se recomienda para mujeres embarazadas.
Verás viñedos, bodegas y panorámicas del valle de Temecula desde el aire.
Tu piloto te dará ideas para visitar y recomendaciones gastronómicas durante el vuelo.
Tu día incluye transporte privado ida y vuelta para tu vuelo compartido en globo sobre el valle vinícola de Temecula, agua embotellada durante toda la experiencia y mimosas para disfrutar mientras flotas sobre los viñedos con la guía de un piloto local.
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