Camina por el barrio rojo de Galveston con un guía local que no endulza la historia — desde relatos de la mafia en viejos hoteles hasta historias de supervivencia en la casa de Molly Waters. Prepárate para una experiencia real, con aceras agrietadas y emociones inesperadas siguiendo los pasos de jugadores, artistas y soñadores.
No esperaba sentirme nervioso solo por caminar por Postoffice Street en Galveston, pero algo en escuchar a nuestro guía decir “la mafia manda” justo al empezar me hizo reír — y también mirar por encima del hombro. Nos detuvimos frente a un edificio antiguo que antes era el Oleander Hotel. El aire estaba denso y salado (como siempre aquí), pero juraría que casi se olía el humo de puros de hace un siglo. Nuestro guía, Marcus, nos contó que aparecía en el Green Book durante la época de Jim Crow — un lugar seguro para viajeros negros cuando tantas puertas estaban cerradas. Eso me impactó más de lo que esperaba.
Pasamos frente a lo que fue la barbería de Sam y Rosario — supuestamente el punto de partida del Imperio Mace. Marcus sonrió y dijo que por la parte trasera vendían licor clandestino para los huéspedes sedientos. Alguien preguntó si alguna vez había probado su vino; él solo guiñó un ojo y dijo, “Todavía no.” La acera estaba agrietada y desigual bajo mis zapatos (ojo al pisar), y no dejaba de pensar en todas las historias que estas calles han absorbido. La palabra clave aquí es tour barrio rojo Galveston — pero, honestamente, se sentía más como un viaje en el tiempo que un simple tour.
Hay una casa que están restaurando ahora — la de Molly Waters. Fue la madama más famosa de Galveston, se retiró millonaria, algo que nadie creía hasta que Marcus nos mostró una foto antigua donde se veía feroz como pocas. La pintura de la terraza se está cayendo, pero aún se intuye cómo fue cuando 40,000 hombres llegaban en tren cada día buscando problemas, amor o ambas cosas. Alguien bromeó diciendo “Vegas antes de Vegas,” pero, sinceramente, se sentía mucho más profundo que eso.
Sigo pensando en lo abierto que fue Marcus con todo — sin ocultar lo feo ni disfrazarlo de glamour. Hubo risas (sobre todo cuando uno intentó pronunciar “Rosarrio” y falló estrepitosamente), pero también momentos de silencio donde solo escuchábamos música lejana de algún bar a la vuelta, imaginando quién más había caminado por estas calles antes que nosotros. Supongo que eso fue lo que más me quedó.
Sí, todas las edades son bienvenidas en este tour guiado a pie.
No, no hay recogida en hotel; el punto de encuentro es en el centro.
Sí, bebés y niños pequeños pueden ir en cochecito o carriola durante el recorrido.
Sí, los animales de servicio están permitidos en este tour.
La ruta es apta para todos los niveles; algunas aceras pueden estar irregulares.
Sí, hay opciones de transporte público cerca del lugar de inicio.
Sí, el personal militar activo puede participar sin costo.
Tu día incluye un tour guiado a pie por el histórico barrio rojo de Galveston con paradas en lugares emblemáticos como el antiguo Oleander Hotel y la casa de Molly Waters; se permiten cochecitos y animales de servicio—solo tienes que encontrarte con tu guía local en el centro para empezar a explorar.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?