Sube a un alegre remolcador con locales y viajeros por Clearwater Harbor, viendo delfines salvajes saltar en la estela del barco. Escucha historias relajadas del guía mientras la brisa marina te refresca y los niños ríen cerca. Es una experiencia cercana y casual, perfecta para momentos auténticos sin grandes shows.
Confieso que reservé el paseo en el Little Toot en Clearwater Beach porque mi sobrina no paraba de hablar de delfines, pero al final me emocioné igual que ella. Hay algo especial al subir a ese pequeño remolcador, con la pintura desgastada y el olor a sal en las cuerdas, que te hace sentir como un niño otra vez. El capitán (creo que se llamaba Rick) saludaba a todos con una sonrisa relajada típica de Florida, soltando datos curiosos sobre delfines entre bromas. No esperaba reír tanto antes de zarpar.
Al principio el agua en Clearwater Harbor parecía un espejo, pero en cuanto arrancamos todo cambió. El motor vibraba bajo los bancos de madera y de repente se oyeron chillidos, no de nosotros, sino de los delfines persiguiendo la estela del barco. La guía explicó que les encanta el oleaje que crea el Little Toot (parece que es algo típico), y efectivamente vimos dos delfines saltar justo al lado. Mi sobrina gritó de emoción y yo dejé caer el móvil intentando grabarlo. En ese instante todo olía a brisa marina y protector solar, y por un momento olvidé el correo, el tráfico y todo lo demás.
Puedes sentarte al sol o en la sombra — yo me moví porque no sabía qué era mejor. No hay mal sitio cuando los delfines salvajes parecen estar haciendo un show solo para ti. En un momento, un niño pequeño intentó decirles “hola” y su mamá se rió; la verdad es que todos parecíamos más ligeros allá afuera. El tour tiene narración, pero no de esa forma aburrida, sino como alguien contándote historias mientras todos miramos las aletas juntos. Además, es fácil llegar en transporte público, algo que ojalá hubiera sabido antes de pelear por el parking (llega temprano, créeme).
Sigo pensando en ese segundo en que los delfines se arqueaban justo bajo el sol, parecía irreal. Si estás cerca de Clearwater Beach y buscas algo sencillo pero mágico (sin necesidad de estar en forma o nada complicado), este paseo para ver delfines es justo lo que tu alma necesita.
No se especifica la duración exacta, pero la mayoría de los tours narrados duran entre 1 y 2 horas.
El tour parte desde Clearwater Beach, en Clearwater Harbor.
Sí, adultos y niños de todas las edades son bienvenidos en este tour de delfines.
Puedes elegir asiento al sol o en la sombra mientras estás a bordo.
Sí, llega 45 minutos antes para estacionar y comprar los boletos; el abordaje empieza 10 minutos antes de la salida.
Sí, hay opciones de transporte público cerca de Clearwater Beach.
Los bebés son bienvenidos, pero deben ir en el regazo de un adulto durante el tour.
Los avistamientos son muy comunes porque les encanta jugar en la estela del barco, aunque no se pueden garantizar al 100%.
Tu día incluye un tour narrado con guía local a bordo del remolcador Little Toot por Clearwater Harbor y hacia el Golfo de México; podrás elegir asiento en sombra o sol y moverte libremente mientras los delfines salvajes juegan cerca antes de regresar juntos a la orilla.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?