Deslízate en Segway frente al Palacio Real y la Catedral de la Almudena, cruza plazas animadas y parques junto al río con un guía local que te contará historias que no encontrarás en ninguna guía, y termina con una deliciosa tapa de paella si eliges la ruta larga. Es divertido, relajado y te muestra otra cara de Madrid.
Confieso que al principio me daba un poco de vergüenza verme en Segway por Madrid — ya sabes esa sensación cuando parece que todos saben lo que hacen menos tú. Pero nuestro guía, Javier, solo sonrió y me pasó un casco. “¿Primera vez?” preguntó (asentí), y nos enseñó a inclinar el cuerpo y manejar. Es sorprendentemente suave, casi como flotar sobre las piedras antiguas cerca de Plaza de Santiago. Al principio tenía las manos sudadas, pero tras dos calles ya iba detrás de él, intentando no reírme en voz alta.
Pasamos por calles estrechas donde el aire olía a café y masa frita — ¿serían churros? En la Plaza Mayor, un rayo de sol y el murmullo de músicos callejeros nos envolvieron. Javier señaló el Mercado de San Miguel (“las mejores aceitunas de la ciudad,” dijo) y nos contó historias de reyes que caminaban por esas mismas calles. Mientras esperábamos el semáforo en Puerta del Sol, captaba fragmentos de conversaciones en español — unos viejos discutiendo sobre fútbol.
Lo mejor del tour en Segway fue deslizarse junto al río Manzanares. La brisa era más fresca y los árboles susurraban arriba. Pasamos junto a corredores y familias haciendo picnic, y me pregunté si los locales alguna vez se cansan de tanto espacio (seguro que no). En el tour largo paramos en el enorme parque Casa de Campo y al final nos sentamos a probar una tapa de paella en un pequeño restaurante donde intenté pedir en español. El camarero sonrió con paciencia ante mi acento; Javier me guiñó un ojo.
La verdad, no esperaba que Madrid se sintiera tan relajado desde un Segway. Hay algo divertido y liberador en recorrer plazas centenarias con desconocidos que al final terminan pareciendo amigos. Aún recuerdo esa última vista hacia el Palacio Real al caer la tarde — ojalá hubiera tomado más fotos, pero quizás fue mejor así.
Puedes elegir entre 60 minutos (Esencial), 90 minutos (Centro) o 150 minutos (con tapa).
La opción de 150 minutos “Madrid con tapa” incluye una tapa de paella en un restaurante.
Sí, cada participante recibe una breve instrucción de un guía experto antes de empezar.
Verás Plaza Mayor, Palacio Real, Catedral de la Almudena, Mercado de San Miguel, Casa de Campo, paseos junto al río Manzanares y Puerta del Sol.
La edad mínima es 10 años (acompañado por un adulto) y el peso recomendado está entre 35 y 125 kg.
Sí, tu guía local habla español e inglés.
Sí; en días de lluvia se proporcionan chubasqueros para que no te mojes durante el recorrido.
Tu día incluye el uso de un Segway con casco y espacio para tu mochila, entrenamiento completo antes de salir, guía local bilingüe durante todo el recorrido elegido, además de un chubasquero si llueve. Si reservas la opción más larga, acabarás con una tapa de paella en un restaurante local antes de volver a la ciudad.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?