Recorre la bodega en funcionamiento de Bodegas Teneguía en La Palma con un guía local, descubre cómo las uvas se convierten en vinos premiados y prueba varias variedades únicas en su origen. Ríe, escucha historias de la gente del lugar y disfruta esos pequeños detalles sensoriales — como el suelo volcánico en tu copa o la luz del sol sobre barricas viejas — que te acompañan mucho después de irte.
Entramos en Bodegas Teneguía justo cuando el sol de la mañana empezaba a calentar Fuencaliente. El aire dentro tenía un aroma terroso, casi dulce, como a uvas machacadas y madera vieja. Nuestra guía, Ana, nos llamó con una sonrisa y empezó a contarnos sobre su abuelo, que traía uvas aquí cuando la báscula de fuera aún brillaba. Intenté imaginarlo: botas polvorientas, risas, y quizá alguna que otra maldición cuando la cosecha era pesada. Este lugar es más antiguo de lo que parece — setenta años de vino corriendo por estas paredes.
Ana nos llevó más allá de las despalilladoras (más ruidosas de lo que esperaba) hasta la zona de prensado de uvas. Había herramientas antiguas en exhibición — ella llamó a una “el pisón,” y seguro que lo pronuncié mal porque se rió y me corrigió. La zona de embotellado olía diferente, más metálico, pero se oía a alguien tarareando detrás de un montón de cajas. No es un sitio pulido para turistas; aquí trabajan personas de verdad, contando chistes en español que solo pillaba a medias.
La cata fue en una larga mesa de madera junto a una ventana con vistas a las viñas. Probamos tres vinos — un blanco con un toque casi salado por la tierra volcánica (no me lo esperaba), un tinto que Ana dijo que va perfecto con queso de cabra de la zona, y un Malvasía dulce que se quedó en la lengua más tiempo del que imaginé. Afuera, un niño corría persiguiendo un lagarto, y todos nos echamos a reír un momento. Puedes comprar botellas allí mismo; yo me llevé dos para unos amigos, aunque la verdad me habría gustado comprar más.
Sí, la cata está incluida dentro de la visita guiada en Bodegas Teneguía.
La bodega tiene más de 70 años elaborando vino en La Palma.
Sí, puedes comprar botellas en el Punto de Venta después del tour y la cata.
Todas las áreas son accesibles para sillas de ruedas y los bebés pueden ir en cochecitos.
La bodega está en Fuencaliente, en la isla de La Palma.
Los niños son bienvenidos, pero solo mayores de 18 años pueden participar en las catas.
De lunes a viernes de 10:00 a 18:00; sábados, domingos y festivos de 10:00 a 13:00.
Tu día guiado incluye entrada a Bodegas Teneguía en Fuencaliente, el parking cubierto si vas en coche, un recorrido completo por el proceso de elaboración con historias del personal local, y una generosa cata en la mesa de la bodega antes de despedirte.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?