Recorre las dunas rojas de Dubái en un 4x4 con un guía experto y disfruta del atardecer en la arena. Prueba sandboarding o paseos en camello en el campamento Al Awir, luego déjate sorprender con arte de henna y fotos con vestimenta tradicional antes de una cena buffet BBQ con shows en vivo de danza del vientre y fuego bajo las estrellas del desierto.
¿Alguna vez te has preguntado cómo se siente estar en la cima de una duna, rodeado solo de arena y cielo? Así empezó nuestro safari por el desierto de Dubái, bueno, después de que nuestro conductor Khalid nos recogiera justo en el lobby del hotel (tenía una sonrisa tranquila que me hizo sentir en buenas manos). La ciudad quedó atrás rápido, reemplazada por un mar infinito de arena roja. No esperaba que el aire oliera tan limpio aquí — un poco seco y con un toque metálico. Luego llegó el dune bashing. La verdad, me agarré fuerte más de una vez; Khalid se rió y dijo: “¡Esto es solo el calentamiento!” Mi estómago no estaba tan seguro.
El atardecer nos sorprendió aún en las dunas de Lehbab. Es difícil de describir — la luz volvió todo de un naranja suave y solo se escuchaba el viento y nuestras risas rebotando por las pendientes. Había gente probando sandboarding (yo lo intenté, me caí dos veces y me rendí), y unos niños corriendo en quads. Después nos fuimos al campamento Al Awir, donde todo se calmó. Los camellos esperaban cerca de la entrada — su pelaje era más áspero de lo que imaginaba — y una mujer me ofreció té dulce apenas entré. El aroma a carbón de la barbacoa flotaba en el aire.
Probé la henna por primera vez (la artista se rió de mi mano temblorosa) y me convencieron para ponerme una kandura para las fotos — estoy seguro de que me veía ridículo, pero a nadie le importó. La cena fue tipo buffet: pollo a la parrilla, ensaladas, algo picante que aún no sé qué era. Hubo un momento durante el show de fuego en que todo quedó en silencio salvo el crepitar de las llamas — me quedé mirando el cielo un rato. Todo el lugar parecía suspendido entre dos mundos.
A las 9 pm ya estábamos de vuelta en el coche de Khalid, rumbo a las luces de Dubái otra vez. Tenía los zapatos llenos de arena y la cabeza pesada, pero de la mejor manera. Si estás pensando en hacer un safari por el desierto desde Dubái con paseo en camello y cena con espectáculo, simplemente hazlo. Hay cosas que no se pueden planear — como cuánto vas a reír o lo extrañamente tranquilo que se siente allá afuera.
Sí, incluye recogida compartida en hoteles o casas dentro de Dubái, Sharjah y Ajman.
Dune bashing en el desierto de Lehbab, fotografía al atardecer, paseos opcionales en quad o buggy, experiencia en camello, sandboarding, tatuajes de henna, cena con shows en vivo.
Sí, el buffet BBQ ofrece platos vegetarianos y no vegetarianos.
El tour comienza al final de la tarde y termina con el regreso al hotel alrededor de las 9 pm.
Sí, los bebés pueden participar pero deben ir en el regazo de un adulto; hay asientos especiales disponibles bajo petición.
No se recomienda para embarazadas ni personas con problemas de columna o cardíacos.
Sí, los paseos en quad y buggy son opcionales y tienen costo extra en el desierto de Lehbab.
Se ofrecen botellas de agua ilimitadas, refrescos, café y té durante toda la experiencia.
Tu día incluye recogida compartida en hoteles de Dubái (y Sharjah o Ajman), dune bashing en las dunas rojas de Lehbab con guías certificados, equipo para sandboarding si quieres probarlo, y entrada al campamento Al Awir donde te recibirán con refrescos. También tendrás paseo en camello, tatuajes de henna para mujeres y vestimenta árabe tradicional para fotos antes de disfrutar una cena buffet BBQ (con opciones vegetarianas y no vegetarianas), varios postres y ensaladas, además de bebidas ilimitadas mientras ves shows de danza del vientre, bailarines tanoura y espectáculos de fuego bajo el cielo abierto, para luego regresar a tu hotel o casa.
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