Conduce un potente buggy Can-Am Maverick X3 por las dunas más salvajes de Dubai con un guía local. Prepárate para sentir el viento en la cara, recorrer antiguos caminos beduinos y compartir risas sinceras con tu grupo. Incluye recogida en hotel y todo el equipo de seguridad —solo trae valor (y quizá una botella extra de agua).
Todo empezó con una sonrisa de nuestro conductor, que nos entregó agua fría antes de salir del hotel en Dubai. Yo aún estaba medio dormido, pero la ciudad se desvaneció rápido mientras avanzábamos: de repente solo había arena infinita y ese silencio extraño que solo se siente en el desierto. Nuestro guía, Ben (de Nueva Zelanda, aunque lleva años viviendo aquí), bromeaba diciendo que “Big Red” era la única duna que le ponía nervioso. Me pasó unos guantes y un casco —olían a protector solar y polvo, algo raro pero reconfortante— y me explicó lo básico del Can-Am Maverick X3. No soy muy fan de los motores, pero 192 caballos de fuerza sonaban a diversión asegurada.
La primera vez que pisé el acelerador, sentí un vuelco en el estómago, como cuando caes en un ascensor, pero más fuerte. La arena no es tan suave como parece; si la pisas mal, te hace vibrar hasta los dientes. Seguimos a Ben hasta la Montaña Rosa, donde todo parecía deslavado salvo por esas rayas de colores locos que cruzaban las dunas. En un momento nos detuvimos en la cima —el viento azotaba mi bufanda y las gafas se me empañaban— y Ben señaló unos viejos senderos beduinos que se perdían en la nada. Nos contó historias de caravanas de camellos y cómo aún hoy la gente viene aquí a tomar té al atardecer. Intenté darle las gracias en árabe (Li se rió cuando lo dije mal), y honestamente, eso me quedó más grabado que la adrenalina.
No esperaba que me importara tanto el silencio entre paseos —ese momento en que todos se quedan quietos recuperando el aliento, sin hablar mucho, solo el crujir de la arena bajo las botas y ese olor seco cuando el viento se calma. El camino de regreso se me hizo más corto; tal vez porque todos estábamos sonriendo como tontos o porque ya estaba pensando en repetir la experiencia. Si buscas una excursión desde Dubai que sea más que una simple “aventura en el desierto”, este tour en buggy vale cada grano de arena que te quedará en los zapatos.
El paseo en buggy dura aproximadamente 2 horas, sin contar el tiempo de recogida y regreso al hotel.
Sí, la recogida y regreso al hotel en Dubai están incluidos en el precio del tour.
Conducirás un buggy Can-Am Maverick X3 RR Turbo 4x4 con transmisión automática.
La edad mínima para conducir es 16 años; los pasajeros deben tener al menos 6 años.
Sí, se incluye todo el equipo de seguridad (casco, gafas, guantes) además de agua embotellada y refrescos.
Sí, cada buggy tiene espacio para dos personas; pueden turnarse para conducir o ir uno de pasajero y otro de conductor.
Este tour no se recomienda para embarazadas ni personas con problemas de columna o cardiovasculares.
Tu día incluye recogida y regreso al hotel en cualquier punto de Dubai, agua embotellada durante toda la experiencia, todo el equipo de seguridad necesario como casco, gafas y guantes, apoyo de guías occidentales expertos en cada sesión, refrescos durante las pausas en las dunas y, por supuesto, tu propio buggy Can-Am Maverick X3 4x4 de dos plazas para conducir por rutas legendarias como la duna Big Red y la Montaña Rosa, antes de volver a casa lleno de arena pero feliz.
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