Vuela sobre Luxor al amanecer en un globo, explora tumbas reales en el Valle de los Reyes y pasea bajo las enormes columnas de Karnak con un guía egiptólogo. Disfruta un almuerzo local y leyendas entre piedras milenarias antes de acabar en el templo de Luxor al anochecer — momentos que no olvidarás.
Lo primero que me llamó la atención no fue la vista, sino el silencio. Allí arriba, en el globo sobre Luxor justo antes del amanecer, apenas se escuchaba nada más que el susurro del quemador y algún que otro pájaro adormilado. La ciudad seguía medio dormida. Nuestro piloto sonreía y señalaba el Nilo, todo plateado y azul con esa luz temprana. Confieso que tenía las manos heladas de agarrarme a la cesta (¿nervios?), pero ver pasar los templos y los campos verdes valió totalmente la pena.
Cuando aterrizamos —un poco más brusco de lo que esperaba, pero todos nos reímos—, nuestro guía egiptólogo nos recibió con una sonrisa tranquila y un termo de té de menta. Primero fuimos a ver los Colosos de Memnón. Son enormes, pero lo que más me quedó fue cómo los locales seguían con su rutina matutina cerca, saludándonos al pasar. Luego llegó el Valle de los Reyes. Por dentro las tumbas son frescas (un alivio) y algunas pinturas parecen recién hechas, tan vibrantes. Nuestro guía conocía cada historia —incluso nos mostró dónde Howard Carter rayó su nombre en una pared (eso no me lo esperaba).
El templo de la reina Hatshepsut parecía casi irreal contra esos acantilados; intenté sacar una foto sin turistas pero al final me rendí y me quedé viendo a la gente posar con sombreros de sol. El almuerzo fue sencillo —pollo a la parrilla, arroz y algo con berenjena que aún recuerdo—, todo bajo un toldo a medias mientras unos gatos callejeros miraban nuestras sobras con esperanza. El templo de Karnak es inmenso; caminar entre sus columnas es como pasear entre gigantes. Por la tarde, las piernas me dolían pero la cabeza me zumbaba de todo lo que habíamos visto.
Terminamos en el templo de Luxor justo cuando caía la noche, con las luces encendiéndose una a una a lo largo de la Avenida de las Esfinges. Es difícil explicar lo antiguo que se siente todo aquí —no solo viejo como un museo, sino vivo a su manera. Nuestro guía nos contó historias de Amón-Ra y los faraones hasta que tuvimos que volver al coche. Aún ahora, a veces recuerdo ese silencio en el globo antes de que despertara todo el mundo.
El vuelo en globo suele durar entre 35 y 60 minutos.
Sí, el tour incluye recogida y regreso al hotel.
Visitarás los Colosos de Memnón, el Valle de los Reyes (varias tumbas), el templo de la reina Hatshepsut, el templo de Karnak, la Avenida de las Esfinges y el templo de Luxor.
El almuerzo está incluido tras visitar varios sitios; hay opciones vegetarianas disponibles bajo petición.
Sí, el guía es un egiptólogo certificado que comparte detalles históricos durante todo el día.
Sí, el transporte y todas las áreas visitadas son accesibles para sillas de ruedas.
Los bebés pueden participar pero deben ir en el regazo de un adulto durante el transporte; se permiten cochecitos o carriolas.
Incluye entradas a los principales sitios; puede que se requieran tickets adicionales para tumbas especiales como la de Tutankamón.
Tu día incluye recogida temprana en hotel en vehículo de lujo, paseo en globo al amanecer sobre Luxor con certificado de vuelo, agua embotellada durante todo el recorrido, traslado en barco para cruzar a la orilla oeste, entradas a los principales sitios como Karnak y Valle de los Reyes (con opción a entradas extra para tumbas especiales), y un almuerzo tradicional local antes de regresar a tu hotel o barco en Luxor.
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