Recorrerás las Cuevas Hato con un guía local (ojo con los murciélagos), harás snorkel junto a tortugas en Playa Piskado y te relajarás en la arena suave de Porto Mari. La recogida en hotel hace todo más fácil—solo lleva tu toalla, protector solar y ganas de aventura.
“¿Ven esas formas allá arriba? Eso es el ‘Gigante Dormido’”, dijo nuestro guía, iluminando el techo de la cueva con su linterna. Entrecerré los ojos intentando distinguirlo entre la piedra caliza que goteaba; la verdad, para mí parecía más una nube irregular que un gigante, pero bueno, eso será cosa mía. El aire dentro de las Cuevas Hato era fresco y húmedo en la piel, y cada paso resonaba en piedras que llevan aquí más tiempo del que cualquiera puede imaginar. Murciélagos volaban sobre nuestras cabezas—uno pasó tan cerca que me agaché (no es mi mejor momento). El guía se rió y nos contó sobre los murciélagos frugívoros que habitan aquí. El olor era terroso, casi dulce cerca de algunas pozas.
Después de salir (esos 49 escalones se sienten, sobre todo si no estás acostumbrado a la humedad), manejamos hacia el oeste pasando por casitas pintadas con colores que ni siquiera tienen nombre en casa. En Playa Piskado, el sol brillaba fuerte sobre el agua, pero bajo la superficie todo parecía ir más lento—las tortugas marinas se deslizaban como si tuvieran todo el día. Nunca había hecho snorkel con tortugas; son más grandes de lo que imaginaba, con ojos suaves y un andar algo torpe que te saca una sonrisa bajo el agua. Un pescador nos saludó desde su bote y nos indicó dónde buscarlas (creo que se divertía con nuestra emoción).
La última parada fue la playa Porto Mari. Para entonces estaba salado y con hambre, pero no me importó—dejé caer la toalla en la arena y me dejé flotar en un agua tan clara que podías ver tus dedos. Había familias riendo cerca, alguien vendiendo bebidas frías bajo una sombrilla desgastada. Probé un snack en uno de los quioscos de la playa—no recuerdo el nombre, pero sabía a coco y a sol. Quedó tiempo para respirar y ver las nubes pasar sobre las colinas de Curazao antes de regresar.
La visita guiada dentro de las Cuevas Hato dura aproximadamente 1 hora.
Sí, el snorkel con tortugas está incluido en Playa Piskado.
Sí, el tour incluye recogida y regreso al hotel.
Debes subir y bajar unos 49 escalones tanto en las Cuevas Hato como en Playa Piskado.
No, no incluye almuerzo; puedes llevar snacks o comprar comida en la playa Porto Mari.
Los bebés pueden unirse, pero deben ir en el regazo de un adulto o en cochecito.
Tu día incluye recogida y regreso al hotel, entradas a todos los sitios, agua embotellada durante el recorrido y la guía de un local que conoce cada colonia de murciélagos y quiosco de playa que vale la pena antes de volver a tu hotel en Curazao.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?