Remarás en las cálidas olas de Tamarindo con un instructor local que mantiene el ambiente relajado pero sabe lo que hace. Aprenderás lo básico de seguridad en la arena y luego intentarás ponerte de pie — si no lo logras, te devolvemos el dinero. Prepárate para risas, atardeceres suaves y esa sensación única cuando por fin atrapas tu primera ola.
Aún recuerdo la primera salpicadura de agua salada cuando entré en Tamarindo — la verdad, mi corazón latía mucho más rápido de lo que esperaba. Nuestro instructor, Diego, llevaba una camiseta antirozaduras descolorida por el sol y una sonrisa como si hubiera visto todo tipo de caídas. Primero nos enseñó a ponernos de pie en la arena (me caí dos veces solo practicando), luego cargamos las tablas y nos metimos al agua. El mar estaba cálido, casi sedoso, y unos niños cerca reían mientras parecía tan fácil. Intenté no pensar demasiado en eso.
La clase duró unos 90 minutos — o casi dos horas porque no parábamos de reír y hacer preguntas. Diego nos explicó la corriente y señaló cuáles olas eran “amigables” para principiantes. Hubo un momento en que gritó “¡Ahora!” y por fin me puse de pie unos segundos — las piernas temblaban, pero ahí estaba. Escuché a alguien animando desde la orilla (quizá mi amigo o algún surfista que entendía). La palabra clave aquí es clase de surf en Tamarindo, pero en realidad fue más como pasar el rato con locales que querían que nos divirtiéramos, nada formal.
Al final, tenía los brazos como gelatina y arena por todos lados (todavía encuentro en mi ropa días después), pero no me importó. Diego dijo que si no nos poníamos de pie nos devolvía el dinero — pero todos logramos al menos una ola de verdad. Es curioso cómo me preocupaba verme ridículo; a nadie le importó salvo a mí. El sol ya bajaba cuando terminamos, y volver caminando con las tablas bajo el brazo se sintió como una pequeña victoria. Si estás pensando en una clase de surf en Tamarindo desde cualquier lugar de Guanacaste… simplemente hazlo. Te sorprenderás.
La clase dura entre 1.5 y 2 horas, según el tamaño del grupo.
Sí, se proporciona tabla de surf y camiseta antirozaduras para cada participante.
Sí, los principiantes son bienvenidos — aprenderás lo básico de seguridad y cómo ponerte de pie.
Solo necesitas tu traje de baño, protector solar y buena actitud.
Sí, si no consigues ponerte de pie durante la clase te devolvemos el dinero.
Se aceptan bebés y niños pequeños si usan cochecito o carriola en el lugar.
Sí, los animales de servicio están permitidos en esta actividad.
No, no se recomienda para embarazadas ni personas con problemas de columna o cardiovasculares.
Tu día incluye el uso de tabla de surf y camiseta antirozaduras durante la clase con un instructor profesional local en la playa de Tamarindo — solo lleva traje de baño y protector solar; todo lo demás está listo cuando llegues al punto de encuentro.
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