Desde el Observatorio Dora, mira hacia Corea del Norte, recorre el inquietante Tercer Túnel bajo la DMZ, disfruta snacks locales en la Aldea de la Unificación y cruza el puente colgante del Mt. Gamaksan tras una breve caminata—todo en grupo pequeño con recogida en hotel incluida. Esta excursión desde Seúl te dejará con más preguntas que respuestas, pero de las buenas.
Lo primero que me impactó fue el silencio en el Observatorio Dora. Estás ahí, mirando con binoculares esos tranquilos campos norcoreanos, y se siente una paz extraña—aunque sabes lo que hay detrás de esa calma. Nuestra guía, Minji, hablaba en voz baja mientras señalaba aldeas lejanas y hasta algunas figuras diminutas moviéndose. Intentaba imaginar cómo sería la vida allá. No es algo que puedas explicar bien hasta que lo ves con tus propios ojos.
Temprano esa mañana, todos subimos a la van frente a mi hotel en Seúl (casi me olvido el pasaporte—no lo hagan). El viaje hacia el norte fue rápido, como una hora, pero se nota el cambio de ambiente al acercarte al Parque Imjingak. Allí hay una vieja locomotora oxidada y golpeada por la guerra. Tomamos un café mientras Minji gestionaba nuestros tickets para la DMZ—bromeaba sobre lo impredecible que pueden ser las filas. El aire olía a barro del río y a pino.
No esperaba realmente caminar dentro del Tercer Túnel de Infiltración. Allí abajo hace frío, la piedra húmeda roza tus hombros si eres alto (yo no lo soy). El túnel es estrecho y empinado—mis piernas ardían cuando subimos de nuevo. Alguien del grupo se reía diciendo que deberían advertir a quienes tienen rodillas delicadas; seguro que lo hacen. Después paramos en la Aldea de la Unificación para probar chocolate de frijol y helado de soja (el helado es... diferente, pero vale la pena probarlo solo para decir que lo hiciste).
La última parada fue el Puente Colgante del Mt. Gamaksan—una caminata corta por un sendero de tierra rodeado de flores silvestres y el zumbido de cigarras. El puente parece frágil, pero se siente firme bajo los pies. Me quedé un rato en el centro mirando las nubes pasar sobre colinas verdes donde antes lucharon soldados; ahora solo hay viento, sol y gente tomando selfies. De regreso a Seúl, no podía sacarme de la cabeza esa mezcla extraña de peso y esperanza. A veces aún recuerdo esa vista cuando todo se vuelve ruido.
Sí, la recogida en hotel en Seúl está incluida antes de ir a la DMZ.
Sí, es obligatorio llevar pasaporte para entrar a la zona de la DMZ.
La caminata dura unos 10 minutos por un sendero de tierra; se recomienda estar en forma moderada.
Sí, desde el Observatorio Dora podrás ver Corea del Norte con binoculares o a simple vista.
No, no se incluyen paradas obligatorias para compras.
No se incluye almuerzo, pero hay snacks en la Aldea de la Unificación y el Parque Imjingak.
Vistas desde el Observatorio Dora, visita al Tercer Túnel, Parque Imjingak, snacks en Aldea de la Unificación y caminata por el Puente Colgante Mt. Gamaksan.
Puedes elegir entre Hongdae, Myeongdong, Mercado Gwangjang o Dongdaemun para la bajada.
Tu día incluye recogida en hotel en Seúl en vehículo con aire acondicionado y guía local experto que lidera un grupo pequeño; entradas para la DMZ (Observatorio Dora y Tercer Túnel) y acceso al Puente Colgante Mt. Gamaksan; opciones flexibles para bajarte en el centro de Seúl—sin paradas obligatorias para compras.
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