Evitarás las filas de taxis y subirás directamente a un coche con aire acondicionado y un conductor local que conoce Siem Reap al dedillo. Es rápido, fiable y se siente mucho más cómodo después de un vuelo largo.
El aire dentro de la sala de llegadas se sentía pesado tras el vuelo, pero ver mi nombre en un cartel impecable lo hizo todo más sencillo. Nuestro conductor—el señor Dara—estaba justo junto a la salida, sonriendo como si nos hubiera estado esperando solo a nosotros. Nos ayudó con las maletas al instante, sin complicaciones ni momentos incómodos. El coche estaba impecable y fresco, lo que honestamente fue un alivio después del calor pegajoso de Camboya.
Durante el trayecto hacia el centro, noté cómo la ciudad despierta despacio—niños en bicicleta, tuk-tuks zigzagueando entre puestos de fruta al borde de la carretera. Nuestro conductor nos señaló dónde los locales desayunan cerca de Wat Bo Road e incluso nos ofreció botellas de agua fría (un detalle pequeño, pero que se agradece). Todo el viaje duró unos 20 minutos; a esa hora no había mucho tráfico. Me sentí seguro en todo momento—condujo con cuidado y respondió nuestras preguntas sobre los templos de Angkor sin prisa.
Tu conductor te esperará justo fuera de la zona de llegadas con un cartel con tu nombre—fácil de reconocer al salir.
Sí, los traslados privados funcionan a cualquier hora que llegue o salga tu vuelo—solo avísanos tu horario.
Por favor, solicita con antelación si necesitas un asiento infantil; haremos todo lo posible para conseguir uno para ti.
Tu propio coche asegurado con aire acondicionado, conductor local amable, agua embotellada para cada pasajero y un cartel de bienvenida con tu nombre. ¡Nos encargamos también del equipaje!
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