Tu aventura en el Story Bridge de Brisbane comienza con un guía local amigable y una charla rápida de seguridad antes de equiparte para la subida. Siente cómo se calman los nervios mientras subes, con paradas para historias y risas. En la cima, disfruta las vistas panorámicas y toma una foto grupal — luego baja con las piernas temblorosas y una nueva mirada de Brisbane.
Casi pierdo el inicio porque olvidé el control de alcohol — resulta que sí necesitas tener menos de 0.05 para subir al Story Bridge. El equipo en la base fue muy paciente (yo estaba nervioso), y nuestro guía, Sam, tenía esa habilidad de hacer reír a todos con lo de que los arneses se sentían “como un calzón futurista”. Se olía la lluvia en el metal, pero aguantó, solo nubes pasando sobre el río. No paraba de ajustar la correa del casco, probablemente más de lo necesario.
Los primeros pasos se sintieron más empinados de lo que esperaba — mis piernas temblaban un poco. Sam nos mostró lo viejos que eran algunos remaches (“más viejos que mi abuela,” bromeó), y nos detuvimos mientras nos contaba sobre los trabajadores que construyeron el puente en los años 40. A mitad de camino hubo un momento en que solo se escuchaba el viento y el tráfico lejano, como estar en una burbuja sobre todo. La ciudad se veía más suave desde ahí arriba, casi en silencio. Intenté buscar Lamington a lo lejos, pero me distrajo un paraguas rojo brillante abajo — curioso lo que llama la atención cuando estás nervioso.
En la plataforma de la cima (80 metros no suena alto hasta que estás ahí), Sam nos reunió para una foto grupal. Mi pelo volaba con la brisa, pero a nadie le importó. Se veía todo Brisbane — la bahía de Moreton brillando a un lado, las Glass House Mountains apenas visibles entre la neblina al otro. Alguien preguntó si alguien propone matrimonio aquí arriba; Sam sonrió y dijo que pasa más seguido de lo que imaginas. No esperaba sentir tanta calma a esa altura — quizá era alivio mezclado con adrenalina. La bajada fue más fácil, como si la gravedad quisiera que volviéramos al suelo firme.
La experiencia completa dura unas 2 horas desde el inicio hasta el final.
La edad mínima es 6 años (acompañados por un adulto), altura mínima 110 cm y peso máximo 130 kg.
La subida empieza en la base del HSW Precinct en Brisbane.
La escalada en el Story Bridge funciona en casi todas las condiciones climáticas, incluida la lluvia.
Sí, hay opciones de transporte público cerca del punto de inicio.
Tu reserva incluye una foto grupal grande tomada en la plataforma de la cima.
El tour no es recomendado para personas con lesiones de columna o dificultades para caminar; mujeres embarazadas después de las 20 semanas no pueden participar.
Sí, todos los escaladores deben registrar menos de 0.05 en el test de alcohol antes de empezar.
Tu día en el Story Bridge incluye guía experto local durante toda la subida, una demostración de seguridad antes de empezar y una foto grupal grande en la cima para recordar la experiencia.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?