Vuela sobre las surrealistas terrazas blancas de Pamukkale en un globo al amanecer, guiado por locales que conocen cada rincón. Siente el frío de la mañana transformarse en calor mientras flotas sobre Hierápolis y sus piscinas antiguas, y brinda con champán al aterrizar antes de volver al hotel — una experiencia que no olvidarás.
Confieso que sentí un cosquilleo cuando la cesta del globo crujió bajo mis pies — no era miedo, más bien esa mezcla de nervios antes de algo grande. El cielo sobre Pamukkale aún mostraba tonos de madrugada, y nuestro piloto (creo que se llamaba Cem, tenía una forma tranquila de explicar todo) sonrió mientras encendía los quemadores. El calor en mi cara se agradecía en la fresca mañana. Notaba un aroma dulce y mineral en el aire — tal vez de las aguas termales que teníamos justo abajo.
Subimos más alto de lo que esperaba. Desde ahí arriba, las famosas terrazas blancas parecían de otro mundo — como si alguien hubiera derramado leche por la ladera y esta se hubiera endurecido al sol. Cem señaló Hierápolis a un lado; contó que su abuela lo llevaba de niño. Había otros globos cerca, pero casi todo era silencio salvo el sonido del fuego y susurros o risas suaves. Intenté hacer fotos, pero ninguna capturó realmente esa sensación extraña y tranquila.
El aterrizaje fue más movido de lo que imaginaba (alguien aplaudió cuando tocamos tierra), pero enseguida nos ofrecieron copas de champán y todos nos relajamos. Mis manos aún temblaban — ya no de miedo, sino de adrenalina o emoción. Nos dieron unos certificados con nuestros nombres; un poco cursis, pero guardé el mío. El regreso al hotel fue silencioso — todos mirando el paisaje, como si hubiéramos compartido un secreto. A veces todavía recuerdo esa vista cuando el ruido de casa me abruma.
El vuelo dura aproximadamente una hora desde el despegue hasta el aterrizaje.
Sí, está incluida la recogida y el regreso al hotel o puerto en tu reserva.
Te ofrecerán una copa de champán y un certificado conmemorativo del vuelo.
No se recomienda para embarazadas ni personas con problemas cardiovasculares.
Verás las piscinas termales de Pamukkale, las ruinas de Hierápolis y el anfiteatro desde el aire.
Tu mañana incluye recogida y regreso al hotel o puerto, una hora completa flotando sobre las terrazas y sitios antiguos de Pamukkale con un guía local, además de una copa de champán al aterrizar y un certificado para recordar la experiencia antes de volver al hotel.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?