Navegarás entre continentes en Estambul con un guía local que da vida a palacios y antiguas fortalezas. Perfecto para ver los principales atractivos rápido y captar esos pequeños momentos que solo conocen los locales.
Las gaviotas giraban en círculos mientras embarcábamos cerca de Kabataş—siempre hay una brisa salada aquí, incluso en los días más cálidos. Nuestro guía, Emre, nos saludó con un breve resumen de la ruta y señaló a los vendedores de té que se abrían paso entre la multitud (toma un vaso si te gusta fuerte y dulce). El barco partió en silencio, deslizándose frente al Palacio de Dolmabahce. Su fachada de mármol blanco parecía casi irreal desde el agua—mucho más majestuosa de lo que esperaba de cerca. Por la mañana temprano se pueden ver locales pescando en las orillas; saludan si les devuelves la mirada.
Navegamos hacia el norte por el estrecho del Bósforo. A un lado: Europa; al otro: Asia. Es impresionante ver ambos continentes al mismo tiempo. Al pasar bajo los puentes, se escuchan fragmentos de turco de familias charlando en la cubierta y se huele simit (pan de sésamo) de alguna bolsa cercana. De repente aparece la Fortaleza de Rumeli—un enredo de viejas murallas y torres construidas hace siglos para proteger este punto más estrecho. Emre compartió historias de sultanes y asedios que hicieron que todo se sintiera menos como una postal y más como historia viva.
El barco giró hacia el Palacio de Beylerbeyi en la orilla asiática—menos concurrido que su homónimo europeo pero igual de detallado, con jardines que se extienden hasta la orilla del agua. Regresamos navegando junto a tranquilas villas de madera y pequeños puertos donde los pescadores remiendan redes a mano. Todo el recorrido duró alrededor de una hora y media, pero sinceramente, se sintió más corto. Si te gusta la fotografía, la luz del atardecer es perfecta—reflejos dorados por todas partes.
Sí, los bebés y niños pequeños pueden venir en cochecito o carrito sin ningún problema.
El punto de encuentro está cerca de paradas de transporte público en el centro de Estambul—fácil de llegar en tranvía o autobús.
¡Sí! El crucero cubre ambas orillas—tendrás vistas de Europa y Asia desde el agua.
El puerto de salida o la ruta pueden cambiar por seguridad, pero tu guía te informará de cualquier novedad con antelación.
Tu entrada incluye un crucero turístico guiado con un experto local amable, recogida y regreso en el punto de encuentro, además de todos los impuestos locales incluidos por adelantado.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?