Camina por las verdes colinas de Kilimanjaro hasta las cascadas de Materuni (sí, puedes nadar), aprende cómo se hace el café tanzano de la mano de los agricultores locales y relájate en las aguas termales de Kikuletwa. Risas, zapatos embarrados, charlas de verdad y quizás tu nueva forma favorita de tomar café.
Apenas salimos de la furgoneta cerca del pueblo de Materuni, el aire cambió — más fresco, con ese olor a tierra mojada que solo se siente después de la lluvia sobre suelo rojo. Nuestro guía, Joseph, sonrió y señaló las colinas verdes. “No está lejos”, nos aseguró. Yo no sabía si hablaba de distancia o esfuerzo (spoiler: un poco de ambos). La caminata hasta las cascadas de Materuni fue un poco embarrada, pero la verdad es que me encantó resbalar un poco y reírme con los demás. Se escuchaban las cascadas antes de verlas — un trueno suave que hacía que todos calláramos por un momento. Al llegar a la poza, metí los dedos del pie y grité (¡helada!). Algunos se lanzaron de lleno. El rocío me dio en la cara y aunque era frío, me despertó por completo.
Después de secarnos al sol (tratando de no verme ridículo exprimiendo los calcetines), nos acercamos a una pequeña finca de café cercana. Allí estaba una señora mayor — Mama Rehema — que nos mostró cómo tuestan los granos al fuego abierto. Me dejó probar a molerlos con un pesado mortero de madera; pensé que sería mejor en eso. Todos nos reímos cuando Joseph bromeó con mis “brazos de ciudad”. El aroma del café tostado todavía lo recuerdo — ahumado, dulce, casi a chocolate. Bebimos nuestro propio café bajo un techo de chapa mientras las gallinas paseaban a nuestro alrededor.
La última parada fue en las aguas termales de Kikuletwa. Lo gracioso es que “caliente” es relativo — más bien era agua tibia como de baño, pero después de la caminata y el café, fue perfecto. Había niños del pueblo saltando desde raíces de árboles al agua y uno intentó enseñarme a hacerlo (me rajé). La luz del sol se filtraba entre las hojas y todo se veía como en tonos verdeazulados bajo el agua. Nos quedamos flotando un rato, sin hablar mucho.
La excursión dura todo el día e incluye caminata, visita a la finca de café, almuerzo y tiempo en las aguas termales de Kikuletwa.
Sí, incluye un almuerzo caliente local junto con bebidas como cerveza o té.
La caminata es corta pero puede ser exigente; apta para la mayoría de personas salvo quienes tengan problemas cardíacos.
Sí, el transporte privado incluye recogida y regreso gratis desde tu hotel en Arusha.
Sí, está permitido y es recomendable nadar en las aguas termales durante la excursión.
Tu día incluye transporte privado con recogida y regreso gratis desde tu hotel en Arusha, entrada al pueblo y cascadas de Materuni, experiencia práctica preparando café con agricultores locales (y muchas degustaciones), además de un almuerzo caliente con bebidas antes de volver tras disfrutar las aguas termales de Kikuletwa.
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