Camina por los bosques de bambú de El Yunque con un guía local, nada en pozas escondidas bajo cascadas, atrévete a saltar desde acantilados y termina compartiendo un almuerzo con nuevos amigos antes de regresar a San Juan. Prepárate para zapatos embarrados, risas y quizás un poco de valentía que no sabías que tenías.
“Si escuchas los coquíes, entonces estás en El Yunque de verdad,” nos dijo sonriendo nuestro guía José al bajar de la van — y sí, esos pequeños sapitos eran mucho más ruidosos de lo que imaginaba. El aire estaba denso y verde, con un aroma dulce, como hojas mojadas después de la lluvia. Empezamos a caminar entre el bambú, con los zapatos ya embarrados. José nos mostró unas flores de jengibre silvestre que nunca había visto, rojas y vibrantes entre tanto verde. No paraba de decir “poco a poco” — que significa ir despacio — y tenía sentido cuando empezamos a trepar por rocas cubiertas de musgo. Me resbalé una vez; nadie se rió excepto yo.
La primera poza del río estaba más fría de lo que esperaba (me sorprendí, no voy a mentir), pero al minuto ya se sentía bien. Algunos se lanzaron directo desde la cuerda colgante — yo dudé, pero al final me animé. Nada elegante, pero ¿a quién le importa? Bajo el agua todo se volvió silencio, solo el sonido del agua pasando junto a mis oídos. La luz del sol filtrándose entre los árboles hacía dibujos extraños en las piedras del fondo. ¿Sabes cuando dejas de pensar en el móvil, el trabajo o lo que sea? Eso pasó aquí.
La caminata se puso más difícil después — más trepar que andar a veces — pero José siempre preguntaba “¿todo bien?” En un momento nos enseñó a agarrarnos de raíces en vez de ramas (que se rompen fácil). La última poza tenía un tobogán natural; vi a un niño deslizarse tres veces antes de probarlo yo. Mis shorts seguro nunca se secarán del todo después de eso. La comida fue tarde y animada en un lugar al borde de la carretera de regreso a San Juan; plátanos fritos y refresco frío nunca supieron tan bien.
Es una caminata de dificultad moderada a intensa, con trepadas y cruces de río; se recomienda buena condición física.
Sí, incluye recogida y regreso desde tu hotel o puerto en San Juan.
La edad mínima para participar es 7 años.
No, la comida no está incluida, pero hay una parada en un restaurante local para almorzar (a tu cargo).
Usa traje de baño bajo la ropa, lleva toalla y cambio de ropa; se requieren zapatos cerrados.
La duración total es de unas 8 horas, incluyendo transporte y parada para almuerzo.
No, nadar y saltar son opcionales — puedes simplemente disfrutar del paisaje si prefieres.
El guía habla inglés o español; los participantes deben entender uno de estos idiomas por seguridad.
Tu día incluye recogida y regreso en hoteles o puerto de San Juan, entradas a los senderos de El Yunque, agua embotellada durante el recorrido, chalecos salvavidas para las zonas de baño, y un guía certificado por la Compañía de Turismo de Puerto Rico que te acompaña en todo momento — para terminar con una parada en grupo para almorzar en un restaurante local (almuerzo no incluido).
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?