Te acercarás a los barcos cruzando el Canal de Panamá, recorrerás las coloridas calles de Casco Viejo con un guía local y disfrutarás vistas panorámicas desde un antiguo fuerte sobre la bahía. Prepárate para historias reales, café fuerte y mucho tiempo para fotos o simplemente para contemplar la vida pasar.
Nunca imaginé estar tan cerca de un barco tan enorme. En Miraflores, nuestro guía Luis nos animó a acercarnos justo cuando las esclusas empezaban a llenarse—se escuchó un golpe profundo y resonante, y luego todo se movía lento pero pesado. El aire olía a metal húmedo, como lluvia sobre rieles viejos. Luis nos explicó cómo funciona el Canal de Panamá (confieso que solo entendí la mitad), pero ver esos barcos pasar tan justo fue casi tenso. Me sorprendí conteniendo la respiración sin darme cuenta. Él bromeó diciendo que todo panameño crece midiendo el tiempo por el “tráfico del Canal”.
Después nos fuimos a Casco Viejo, la parte colonial de la ciudad. Todo era pintura desgastada y ropa de colores colgada entre balcones, y se oía música desde algún lado (¿quizá una tienda de radios?). Caminamos por calles angostas mientras Luis señalaba marcas de balas en una pared de piedra—al parecer de alguna revuelta hace décadas. Probé un café local en un café pequeño; sabía más fuerte de lo que estoy acostumbrado, casi con un toque a chocolate. Un señor mayor jugaba dominó afuera y nos guiñó el ojo al pasar. No sé por qué, pero eso me sacó una sonrisa.
La última parada fue un antiguo fuerte militar sobre la bahía. El viento soplaba fuerte y la vista se extendía sobre el agua tranquila—el skyline a un lado, la selva al otro. Hay un enorme cartel de Panamá donde todos se toman fotos (sí, nosotros también). Luis nos contó historias de piratas que intentaron colarse hace siglos—se puso muy animado actuándolas, y me hizo reír. Para entonces mi camiseta ya se pegaba por el calor, pero la verdad no me importó. A veces solo quieres quedarte en un momento así.
Sí, incluye transporte privado con recogida flexible si lo solicitas.
La visita guiada en el Centro de Visitantes de Miraflores suele durar entre 1 y 2 horas.
Sí, los guías están autorizados y certificados por la Autoridad de Turismo de Panamá (ATP).
Sí, todas las áreas y superficies son accesibles para sillas de ruedas.
Sí, caminarás por Casco Viejo y verás ruinas y templos históricos.
Sí, los bebés y niños pueden ir en cochecito durante el recorrido.
No, el almuerzo no está incluido a menos que se solicite con anticipación.
Sí, el vehículo privado cuenta con WiFi si lo pides.
Tu día incluye transporte privado con recogida flexible si la deseas, aire acondicionado durante las paradas en Ciudad de Panamá como las esclusas de Miraflores y Casco Viejo, además de WiFi a bordo si lo solicitas para compartir tus fotos del canal al instante.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?