Comenzarás tu excursión en Abel Tasman caminando por senderos desde Marahau hasta Observation Beach, para luego volver en kayak recorriendo calas doradas y pasando por la colonia de focas en Isla Adele. Disfruta un almuerzo fresco en la playa con tu guía y avista aves nativas durante el camino. Es un plan relajado, lleno de pequeñas sorpresas que recordarás mucho después de quitarte la sal del cuerpo.
Para ser sincero, casi me pierdo el tour de kayak y senderismo en Abel Tasman porque dejé mis botas de senderismo en el coche — típico de mí. El guía, Sam, sonrió y dijo: “Aquí andar descalzo no es raro”, pero igual me prestó un par de zapatos de repuesto. Así empezó la mañana: un poco caótica, el sol ya calentando Marahau y el café aún dando vueltas en mi cabeza. Partimos rumbo a Observation Beach, con la arena crujiente bajo los pies (o los zapatos prestados), y no paraba de detenerme a ver cómo la luz se colaba entre esos árboles de hojas gorditas. No esperaba escuchar tantos pájaros — los tui cantando por todos lados, como si alguien silbara desde lo profundo del bosque.
La caminata duró más de lo que pensaba porque me distraje con esas calas doradas tan perfectas. En un momento me senté en un tronco y solo escuché el agua golpeando las rocas abajo. El almuerzo en Observation Beach fue sencillo pero justo lo que necesitaba — un pan fresco con queso local y verduras, fruta dulce y café de prensa que sabía mucho mejor de lo que uno esperaría ahí. Ya éramos tres más Sam, compartiendo historias de dónde veníamos. Un weka (un pájaro, no un pollo) se acercó pavoneándose a nuestras mochilas como si fuera el dueño del lugar.
Después del almuerzo llegó la parte del kayak — para eso me había apuntado realmente. Sam nos dio una rápida explicación (“No te preocupes si te caes — el agua está más cálida de lo que parece”) y nos lanzamos a esas aguas cristalinas azul verdoso. Remar junto a Isla Adele fue surrealista; las focas se tumbaban en las rocas y una se zambulló justo a nuestro lado. El aire olía a sal y frescura. Mis brazos se cansaron antes de lo que quería admitir, pero volver a Marahau con la brisa salada en la cara se sintió como descubrir un secreto local.
Sigo pensando en ese último tramo de regreso — el sol bajando detrás nuestro, todo en silencio salvo el chapoteo de los remos y alguien riendo por sus zapatillas empapadas. Si buscas algo pulido o súper organizado, este no es el plan. Pero justo por eso se me quedó grabado.
El tour dura unas 7-8 horas, comienza a las 8:15 am y termina alrededor de las 4 pm.
Sí, el almuerzo está incluido en Observation Beach con pan recién horneado, fruta, un dulce, café y jugo.
No, no hace falta experiencia previa; los guías te dan instrucciones antes de empezar.
Sí, es posible avistar focas cerca de Isla Adele y aves nativas tanto en la caminata como en el kayak.
No se menciona recogida en hotel; el punto de encuentro es en Marahau antes de partir.
Se pueden adaptar las comidas si avisas con anticipación.
Sí, hay opciones de transporte público cerca de Marahau.
El tour es apto para todos los niveles, aunque implica varias horas de caminata y kayak.
Tu día incluye una caminata sin guía por la costa desde Marahau hasta Observation Beach y luego un kayak guiado de regreso pasando por los puntos de avistamiento de fauna en Isla Adele. Te proporcionan todo el equipo y un almuerzo local fresco con café y jugo al mediodía — solo avisa si tienes requerimientos dietéticos antes de reservar.
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