Montarás en camello por bosques, dunas y playas salvajes del Atlántico en Essaouira, guiado por un local. Harás una pausa junto al mar para disfrutar pan casero, dulces con amlou y té de menta antes de regresar al atardecer — una experiencia que guardarás para siempre tras tu viaje a Marruecos.
No esperaba que los camellos fueran tan tranquilos — o quizás era yo quien estaba nervioso al principio. Nuestro guía, Youssef, me pasó un chèche y me ayudó a envolverlo en la cabeza (todavía no sé atarlo bien), y partimos desde las afueras de Essaouira. La ciudad se fue quedando atrás rápido, dando paso al viento salado y al suave golpeteo de los cascos sobre la arena. Primero vimos pinos, y de repente dunas — doradas y casi infinitas con esa luz del atardecer.
Nos cruzamos con algunos locales paseando a sus perros cerca del bosque, y Youssef señaló unos pozos de piedra antiguos que yo ni habría notado. Nos contó historias de cómo la gente solía cruzar estas dunas en camello para comerciar — intenté imaginar hacerlo por días en vez de unas horas. Tras unas dos horas (mis piernas lo notaron bien), paramos justo frente al Atlántico. Las olas sonaban fuertes pero constantes, casi hipnóticas. Youssef preparó un pequeño picnic: pan casero, dulces, amlou (esa crema de almendra y argán que engancha), y té de menta caliente servido desde bien alto. Tenía las manos llenas de arena, pero no me importó; todo sabía mejor con ese aire marino.
Me reí cuando mi amigo intentó decir “shukran” y lo pronunció mal — Youssef solo sonrió y sirvió más té. El sol empezó a bajar, tiñendo el agua de un plateado por un momento. No fue nada dramático; solo tranquilo y auténtico. De vuelta, no dejaba de pensar en lo diferente que se siente Essaouira comparada con Marrakech — más pausada, más suave en sus bordes. Sigo recordando esa vista sobre las dunas cuando estoy de vuelta en la ciudad.
El paseo dura alrededor de 3 horas en total.
Sí, durante la pausa junto al mar te ofrecen pan casero, dulces con amlou y té de menta.
Sí, el guía te dará un chèche y darâa (trajes tradicionales saharianos) para usar durante el recorrido.
Sí, es apto para todos los niveles físicos, aunque los bebés deben ir sentados en el regazo de un adulto.
El tour empieza en las afueras de Essaouira y se adentra en bosques y dunas cercanas antes de llegar a la playa.
Tu experiencia incluye recogida en Essaouira, agua embotellada durante todo el recorrido, trajes tradicionales saharianos para usar durante el paseo, y una pausa junto al mar con pan casero, dulces con amlou y té de menta fresco antes de volver a la ciudad.
¿Necesitas ayuda para planear tu próxima actividad?